Los dos grupos hoteleros más importantes de España por volumen de negocio, Iberostar y Meliá, ya anuncian la reapertura gradual de sus hoteles en varios destinos del mundo después de más de dos meses sin actividad hotelera. 

El grupo Iberostar ha dado a conocer que en junio reabrirán sus primeros hoteles en destinos como España (Baleares, Canarias y Andalucía), Montenegro, Grecia y México, entre otros. 

El primer establecimiento en recibir visitantes será Iberostar Cristina en Mallorca y lo hará a principios del mes de junio para que los empleados, junto a directivos y la propia familia Fluxá, puedan testar las nuevas medidas de seguridad sanitaria antes de recibir a los primeros clientes. 

Mientras en el Caribe, México fue el país escogido para abrir primero. En México, la cadena española cuenta con 11 hoteles en el Caribe: siete en Riviera Maya, dos en Cancún, uno en Cozumel y uno en Riviera Nayarit. También tiene prevista una nueva apertura en Riviera Nayarit y contempla desembarcar en Los Cabos con dos inmuebles más. 

Se suponía que sitios más preparados como Cuba o Dominicana, islas además, dieran la delantera, pero es México quien menos restricciones impuso a Iberostar para la reapertura. 

Precisamente el fuerte vínculo de Iberostar con Cuba y su colaboración con las entidades turísticas de la isla, que cumple más de 25 años, con presencia además en los lugares más emblemáticos como el Iberostar Grand Trinidad, el Iberostar Grand Hotel Packard en La Habana o el Iberostar Ensenachos en Cayo Santa María, hacía prevenir la reapertura. Pero eligieron a México como primer destino del Caribe en abrirse. 

Su CEO, Sabina Fluxá, explica que “lo complicado no es desarrollar protocolos de seguridad, sino hacerlo con visión holística, rigor científico y sin dar un paso atrás en el cuidado del ecosistema”. 

Mientras Meliá, por su parte, implementa ya en fase piloto o ensayo su programa “Stay Safe With Melia”, es decir, la nueva realidad de sus hoteles para garantizar la seguridad de clientes y empleados.

Para ello, ha seleccionado algunos establecimientos que abrirán en una primera fase como “hoteles de entrenamiento”, implementando en ellos todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los clientes.

Como destaca André Gerondeau, Chief Operating Officer de Meliá Hotels International, “nuestros clientes han pasado por unos meses difíciles, y nuestra obligación es garantizar que puedan disfrutar de sus vacaciones en un entorno seguro y agradable, ofreciéndoles las experiencias y el estilo de vida con el que han estado soñando desde el confinamiento”. 

“Los hoteles de Meliá estarán preparados para acoger con la máxima seguridad a sus huéspedes en cuanto se puedan reactivar las operaciones, lo cual esperamos se producirá de manera escalonada, desde primeros de julio”, detalló. 

“A partir de la apertura inicial de algunos hoteles en Palma de Mallorca y en las zonas de costa de España, la evolución de la desescalada y la demanda nacional e internacional irán determinando el número de hoteles que podremos abrir esta temporada”, aclararon. 

En 2018, Meliá contaba en Cuba con 34 hoteles y 14 661 habitaciones. La compañía española, con una presencia de más de 28 años en la Isla, obtenía ese año beneficios de 22,1 millones de euros, solo en el primer trimestre. 

Con un marcado interés también en el segmento de circuitos, Meliá tiene operaciones en ciudades patrimoniales como Cienfuegos y Camagüey. En estas ciudades Meliá está inmerso en el proceso de rediseño de identidad del hotel Jagua y el hotel La Unión para convertirlos en Innside Cienfuegos Jagua y Meliá Unión. Asimismo, ocurrirá en Camagüey con los hoteles Colón y Gran Hotel. 

Mientras Iberostar en 2019 operaba 27 hoteles con 7881 habitaciones en Cuba, siendo el Hotel Grand Packard el máximo exponente de exclusividad de la compañía española en la Isla.