La producción cárnica, un renglón ampliamente demandado por la población cubana se ha visto disminuida en el primer trimestre del año, según estimaciones de Regla Ferrer Domínguez, Directora Nacional del Porcino y Ganadería en la Isla. 

Según Ferrer, la carne de cerdo “se ha visto deprimida por la baja disponibilidad de alimento animal con que cuentan los productores, fenómeno que afecta la masa cárnica estipulada para cada ejemplar antes de su comercialización”.  

“La utilización del pienso líquido, que constituía una de las alternativas prometedoras que se estaban acometiendo, hoy es una línea truncada, tras la paralización del turismo, pues este sector aportaba el grueso de la materia prima orgánica para la elaboración de dicho alimento”, expresó.

Lo cierto es que los productores de carne en la Isla dejaron de entregar en el primer trimestre del año unas 7000 toneladas de carne de cerdo, mientras que los volúmenes mensuales se mantienen sobre las 9000, cifra muy inferior a las más de 12 mil toneladas que se requieren para mantener el abastecimiento. 

Con ello, el gobierno cubano reconoce un incumplimiento de lo pactado para 2020, de 170 mil toneladas de carne de cerdo. No obstante, dicen desde el gobierno, que el país ha enfatizado en la siembra de alimento nacional para suplir el déficit de pienso, que presenta el ramo porcino. 

Se quiere, además, que se impulse en toda la Isla la generación y diseminación de la crianza de cerdos de capa oscura (criollos), más adaptables a las condiciones de Cuba y a alimentos animales más asequible como el palmiche. 

“Ya está previsto que los primeros tres centros genéticos para este fin se localizarán en Pinar del Río, Sancti Spíritus y Granma. Pero este proyecto es a un mayor plazo. Lo esencial ahora es el levantamiento que se está haciendo con los campesinos que tienen cerdos criollos, para que vayan tributando al autoabastecimiento local, y a esos dos kilogramos de carne de cerdo (por persona, al mes) previstos”, subrayó la funcionaria cubana. 

Desde Cienfuegos, se refiere que se cuenta con una empresa mixta que debe comenzar su proceso inversionista de carne de cerdo a finales de año. 

Sobre la producción de pollo, es relevante que este año todas las provincias del país hayan comenzado a producir carne de pollo, aunque de manera muy pobre, prácticamente insignificante para la demanda nacional de este producto, el de mayor importación de la Isla en la actualidad. 

Hasta la fecha, en Cuba se han producido unas 1098 toneladas de carne de pollo, cifra insignificante ante las 300 000 toneladas de este producto que Cuba importa anualmente.  

El gobierno, no obstante dice que aunque ahora mismo hay pocas opciones de que la situación mejore, en un futuro ya hay contratos de inversión extranjera en las provincias de Pinar del Río, Mayabeque y Artemisa, y en la Zona Especial de Desarrollo Mariel. De allí deben salir en un futuro, unas 100 000 toneladas de carne de pollo. 

En Sancti Spíritus, Octavio del Rosario Arguelles, director de la alimentación en ese territorio, aceptó que hay un déficit en la recepción de harina de trigo por el país. Esa falta representará una afectación a las producciones de la Industria Alimentaria en mayo superior a unas 132 toneladas, que tendrán repercusión directa en la alimentación social. 

La repostería y la producción de galletas son dos de los renglones que más se afectarán, así como el fideo para los mercados paralelos, aunque también la galleta dulce y el pan liberado sufrirán un déficit significativo. Y como sucede allí, sucederá en todo el país. 

Mientras la corporación vietnamita Viglacera, a través de su filial en Cuba ViMariel S.A., donó a la Isla 100 toneladas de arroz, que aliviará un poco, la escasez que se vivió en el primer trimestre del año debido a la sequía profunda en lugares estratégicos como el Sur del Jíbaro. 

Ante los bajos niveles de almacenamiento de agua en la presa Zaza la siembra de arroz de la campaña de frío del Sur del Jíbaro se redujp a la mitad de lo que inicialmente se había planificado. 

Mientras Félix Gómez Pérez, jefe de la División Tecnológica Avícola de Cuba precisó en el primer trimestre del año, respecto a la producción de huevos, que las noticias son más halagüeñas. 

Según el directivo hubo un incremento de 40 millones de unidades con relación a igual periodo del año anterior. Durante los próximos meses la producción debe mantener ese ritmo, lo cual augura un cumplimiento del plan fijado en 1912 millones de huevos.