Continúan las quejas constantes de cubanos, por las imposibilidades de adquirir boletos de vuelos a Nicaragua desde Cuba, a través de la aerolínea Conviasa, de factura venezolana. ¿Qué está pasando y por qué muchos apuntan a un «negocio»?

Los vuelos a Nicaragua, debido al libre visado a cubanos de ese país, siguen siendo los más demandados en la isla, porque para nadie es un secreto, que esta es la ruta rumbo a la frontera sur de Estados Unidos, una estancia en México a la espera del CBP One.

Las autoridades aeroportuarias de Cuba, específicamente del Aeropuerto Internacional José Martí, detallaron hace poco el calendario de vuelos entre La Habana y Nicaragua para este mes de noviembre.

Según el canal de Telegram del aeropuerto, la aerolínea venezolana Conviasa anunció sus frecuencias de vuelos para noviembre, con rutas regulares entre La Habana, Managua y Moscú.

Los vuelos hacia el Aeropuerto Internacional José Martí en La Habana, partiendo desde Caracas, están programados para los lunes, miércoles, jueves y viernes.

En estos mismos días, también operan los vuelos con destino a Managua, Nicaragua, partiendo desde La Habana.

Para los pasajeros que deseen viajar de Managua a Caracas, Conviasa ofrece vuelos los lunes, miércoles y viernes, proporcionando una opción frecuente para quienes necesitan desplazarse entre estas ciudades, en una ruta que realiza una escala regular en La Habana.

Conviasa: única opción directa de vuelos a Nicaragua desde Cuba

Además, Conviasa programó dos vuelos especiales de conexión internacional con Moscú para este mes: el lunes 4, que ya se dio, y el lunes 18 de noviembre. Estas fechas brindan una oportunidad específica para viajar entre Nicaragua y la capital rusa, con una escala en La Habana para quienes vuelen desde Cuba a Nicaragua. O sea, una opción más de vuelo.

Esta aerolínea, Conviasa es la única opción de vuelos directos entre Cuba y Nicaragua, desde hace meses. Como es sabido, muchas compañías eliminaron estas rutas, por miedo a las sanciones económicas de Estados Unidos, a quienes fomentaran esta vía para la emigración ilegal. Las aerolíneas, excepto esta venezolana, que ya posee sanciones, decidieron no volar más.

Con esta única opción directa, el «negocio» de la venta por la izquierda, de estos boletos, se fomentó y los precios se elevaron mucho más de lo que estaban.

Actualmente, conseguir un pasaje por la página web de Conviasa es una odisea, lo mismo sucede con la oficina física en La Habana, donde casi siempre están suspendidas las atenciones o se revenden los puestos en la cola, en fin.

Los cubanos tienen que terminar en el mercado negro, donde los precios del pasaje fluctúa entre los 2500 y los 3 mil dólares por persona ya para el mes de diciembre.