El gobierno cubano ha autorizado la importación de carnes y productos lácteos a empresas rusas. Esta medida se produce en medio de una crisis sistémica en Cuba, en la que asegurar el abastecimiento alimentario se ha convertido en una prioridad clave para la isla.

La aprobación cubana llega tras la evaluación del sistema de control sanitario ruso, realizada por el Centro Nacional de Salud Animal de Cuba. El Servicio Federal de Supervisión Veterinaria y Fitosanitaria de Rusia (Rosseljoznadzor) comunicó que esta auditoría resultó satisfactoria, lo que permite a las empresas rusas operar en el mercado cubano sin restricciones comerciales.

Con esta aprobación, las empresas rusas que operan en la plataforma veterinaria «VetIS» y su componente «Cerber» pueden exportar productos ganaderos, incluyendo carne de res, cerdo, aves y lácteos, al mercado cubano. Este paso refuerza los lazos comerciales entre ambas naciones, quienes han aumentado su cooperación en diferentes sectores en los últimos años.

Según reportes del medio ruso Interfax, la colaboración en productos alimentarios no es reciente. El Ministerio de Agricultura de Cuba ya había extendido en junio de 2023 la acreditación a 14 empresas rusas, que lograron superar una primera ronda de inspecciones en colaboración con Rosseljoznadzor.

Más tarde, en agosto de ese mismo año, otras nueve compañías recibieron también la certificación del Centro Nacional de Sanidad Agropecuaria de Cuba (CENSA) para exportar sus productos hacia la isla.

Desde las manifestaciones de julio de 2021, Cuba ha buscado estrechar lazos económicos y diversificar sus fuentes de abastecimiento, buscando alternativas que alivien el déficit de alimentos y otros bienes básicos en el país.

Un paliativo a la escasez generalizada

La importación de productos ganaderos rusos representa una opción importante para el gobierno cubano en su intento por enfrentar la crisis económica y sanitaria actual. Los productos rusos podrían llegar al mercado cubano en las próximas semanas, si los procesos logísticos avanzan sin contratiempos, lo cual contribuiría a abastecer una parte de la demanda alimentaria de la población.

Las autoridades rusas han mostrado confianza en que esta colaboración beneficie a ambas partes, y aseguran que el mercado cubano presenta un importante potencial de desarrollo para sus exportaciones.