En medio de la creciente preocupación por la inseguridad en Cuba, una familia de Nuevo Vedado, en La Habana, vivió un angustioso episodio cuando un intruso intentó robar en su hogar. El suceso quedó registrado por cámaras de seguridad instaladas en los alrededores de la residencia,según informa 14yMedio.

En medio de la creciente preocupación por la seguridad en Cuba, una familia residente en Nuevo Vedado, La Habana, vivió un angustioso episodio cuando un intruso intentó robar en su hogar, quedando registrado por cámaras de seguridad instaladas en los alrededores de la residencia.

Los afectados, relataron a medios locales su constante temor después del incidente de robo a mano armada que sufrieron recientemente. De acuerdo con su denuncia, este no es el primer intento del mismo delincuente, quien ya había perpetrado dos robos anteriores en su propiedad.

El hecho tuvo lugar alrededor de la medianoche del 16 de diciembre de 2023. Los residentes notaron ruidos sospechosos en su patio, ubicado en la calle 42 y avenida Libertad. Las cámaras de seguridad captaron el momento en que el ladrón ingresó al perímetro del hogar portando un arma de fuego.

La familia identificó al agresor como la misma persona que había perpetrado los dos robos anteriores en su propiedad. Aunque el delincuente, conocido por sus fechorías, había sido detenido anteriormente por estos delitos, fue liberado mientras esperaba un juicio que, sorprendentemente, nunca se llevó a cabo.

Uso de armas de fuego

El video muestra a los residentes saliendo por la puerta trasera de su vivienda alertados por el ruido. En un momento tenso, el ladrón, armado con una pistola, apunta hacia ellos. Gracias a la reacción rápida de los afectados, logran retroceder y cerrar la puerta, evitando así una tragedia.

Según fuentes locales, el historial delictivo del agresor incluye el robo de dos bicicletas en agosto de 2021. También un segundo asalto tres meses después, donde se llevó las mismas bicicletas y una tercera más.

A pesar de haber sido detenido en ocasiones anteriores, su liberación y la falta de un juicio han generado preocupación en la familia, que finalmente logró obtener una orden de arresto. Sin embargo, denuncian la falta de protección policial y la demora en la detención del delincuente, quien actualmente se encuentra prófugo.

La familia cuestiona la eficacia de las autoridades, señalando que la investigación se ha visto obstaculizada y que las denuncias presentadas ante diversas instancias no han recibido respuesta.

Los afectados admiten sentir temor por sus vidas. La sensación de vulnerabilidad los mantiene despiertos por las noches, y temen la posibilidad de un nuevo ataque. Mientras el delincuente sigue en libertad, la pareja clama por una actuación más enérgica de los órganos policiales y la pronta resolución de este caso, que ha sumido a la familia en la constante incertidumbre.