Este sábado a la 1:14 am, murió Lázaro Quintero Bermúdez, el hijo de “el pagador de promesas”.

El joven de solo 36 años de edad padecía cáncer y fue conocido en toda la isla gracias al empeño y devoción de su padre, Omar. Este último fue caminando desde La Habana hasta el Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, en Santiago de Cuba, a modo de promesa para rogar por la salud de su hijo enfermo.

Lázaro padecía desde hace una década por un tumor maligno ubicado entre el corazón y el pulmón. Aunque el desenlace parecía inevitable, su padre decidió Su marchar desde La Habana hasta el Cobre, para implorarle a la Virgen que intercediera por su hijo. El hecho fue conocido en toda la geografía nacional, generando el afecto y simpatía de miles de cubanos que a su paso le brindaban apoyo y hasta delegaban en él algunas de sus peticiones a la virgen.

«Omar, todos los que compartimos tus largas caminatas, supimos y valoramos en ti cuánto lo amabas y querías. Amigo, no tengo palabras en estos momentos. EPD», expresó Aris Arias, directivo de Salud Pública en Santiago de Cuba, al tiempo que calificó como un «gran guerrero» a Omar.

Asimismo recordó la fe y abnegada devoción de este padre por su hijo, y por la Virgen de la Caridad, en aquellas jornadas que conmovieron a todo el país.

«Echaste a un lado tus dolencias y enfermedades para cumplir esa promesa hasta el Santuario del Cobre, y la cumpliste, padre. Se sumaron muchísimas personas, te acompañamos largos kilómetros, siempre mortificado, preocupado, pendiente a él y su estado de salud, todos los vivimos juntos, compartimos tristezas, anécdotas, risas, alegría, sacrificio”, escribió Arias.