Cuba: así se distribuirán los buses eléctricos por provincias para el transporte público

Cuba comenzó la distribución de nuevos buses eléctricos en varias provincias del país, más allá de La Habana, como se había anunciado en un principio. En respuesta a las opiniones ciudadanas tras el anuncio del arribo de 100 nuevos microbuses eléctricos a La Habana, el Ministerio de Transporte modificó su estrategia de distribución, según aseguró en Facebook, el Ministro, Eduardo Rodríguez.

Aunque inicialmente se había planteado concentrar todos los vehículos en la capital, las sugerencias del público llevaron a una reevaluación que beneficiará también a otras provincias del país. Detalles de inmediato.

Del total de 100 microbuses eléctricos recién incorporados, 50 permanecerán en La Habana, ciudad que concentra aproximadamente el 50% del tráfico urbano nacional.

Los otros 50 se distribuirán teniendo en cuenta la densidad poblacional y las necesidades de movilidad de los territorios. Las provincias que recibirán estos nuevos vehículos son: Santiago de Cuba, con 20 microbuses, Holguín, con 10 unidades, Camagüey, con 10 unidades y Villa Clara y Ciego de Ávila, con 5 microbuses cada una.

Esta asignación permitirá cubrir rutas cortas de alta demanda, especialmente en tramos de hasta 10 kilómetros, para los cuales estos vehículos —con capacidad para 14 pasajeros— son ideales.

Buses eléctricos para varias provincias en Cuba

Según la oficialidad, la decisión de no distribuir los vehículos en todas las provincias se basó en criterios técnicos: se requiere un mínimo de cinco microbuses para operar una ruta con un nivel de servicio eficiente.

En futuras adquisiciones, dijeron, se contemplará seguir ampliando este servicio a otras provincias, dependiendo de la disponibilidad de recursos y de las condiciones del parque automotor.

En paralelo, se está evaluando el envío de 67 microbuses de la marca Gazelle, actualmente fuera de servicio, hacia provincias que podrían recuperarlos.

Según Rodríguez, esta práctica «no representa una política discriminatoria, sino una estrategia de aprovechamiento de recursos en medio de las limitaciones económicas» que enfrenta el país.

De hecho, varias provincias han logrado reactivar vehículos desgastados por el uso en La Habana, adaptándolos a un régimen operativo menos exigente.

Esta medida se sumará a otras acciones en curso, como la expansión de los triciclos eléctricos a todas las provincias antes de que finalice el año, así como la adquisición de neumáticos, baterías y otros recursos para las empresas de transporte en los territorios.