Cultura

Gelatina con leche evaporada, en 7 pasos

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Añadir leche a la gelatina, en vez de solo agua, nos dará un postre más cremoso y nutritivo. E igual de sabroso y fácil de digerir, al menos para quienes toleran la lactosa. Directorio Cubano trae el paso a paso.

La leche evaporada es leche de vaca tradicional con menos porcentaje de agua. Un concentrado lácteo que brinda a nuestras recetas, dulces y saladas, una textura más cremosa, esponjosa y jugosa.

Ingredientes (para 6 porciones):

  • 1 paquete de gelatina, tamaño estándar (el sabor no influye en el resultado)
  • 1 taza de agua (240-250 mL)
  • 2 tazas de leche evaporada

Preparación:

  1. Ponemos la leche evaporada en el congelador, para conseguir una textura más espumosa (mínimo por una hora antes de preparar la gelatina).
  2. Echamos el agua en una olla, y ponemos a fuego alto hasta la ebullición. Como es tan poquita demora solo unos minutos.
  3. Justo cuando hierve añadimos el polvo de gelatina. (Es importante no demorar, para no perder líquido por evaporación).
  4. Removemos bien con un tenedor, o una batidora de varillas. (Resulta fundamental, así el polvo se disuelve completamente, sin dejar grumos). Y reservamos.
  5. Aparte, echamos en una vasija honda la leche evaporada (luego de sacarla del frío), y batimos hasta que comienza a espumar.

“Podemos hacerlo a mano, o con una batidora de varillas eléctrica. La única diferencia es el tiempo, a mano demora más conseguir la textura deseada. También podemos usar la licuadora”, explica Erika Palma.

  1. Entonces añadimos la gelatina disuelta en la leche evaporada, de a poco, sin parar de batir hasta lograr una textura espumosa.
  2. Luego pasamos la mezcla a un(os) molde(s).
  3. Esperamos que adquiera temperatura ambiente, y metemos en congelación por 4 horas, mínimo, para que cuaje bien.

Pasado ese tiempo, ¡nuestra gelatina con leche evaporada está lista para comer! Si dividimos la mezcla en moldes para una porción, solo debemos sacar uno del frío, tomar una cuchara y darnos el gusto.

Si, en cambio, echamos toda la mezcla en un mismo molde grande, primero debemos desmoldar. “Sumergimos el molde en agua caliente durante unos segundos. Sacamos del agua y extraemos nuestra gelatina. ¡Muy sencillo!”, recomienda Erika.

A falta de leche evaporada, podemos usar leche condensada, o nata, pero esto es historia para otra publicación de Directorio Cubano. Ahora queremos saber si les gustó esta manera “novedosa” de preparar gelatina, y que nos compartan recetas de su propio quehacer cotidiano.

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