El actual mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, pidió a la Corte Suprema frenar la ciudadanía por derecho de nacimiento este jueves. ¿Qué pasará?

El actual inquilino de la Casa Blanca solicitó a la Corte Suprema intervenir en su intento de restringir la ciudadanía estadounidense por derecho de nacimiento, algo que reduciría, de conseguirse, el alcance de los bloqueos judiciales que impiden la implementación de su orden ejecutiva sobre inmigración.

El Departamento de Justicia presentó la solicitud en respuesta a las medidas cautelares impuestas por tribunales federales en los estados norteamericanos de Washington, Massachusetts y Maryland.

La orden de Trump, firmada el 20 de enero tras asumir nuevamente la presidencia, prohíbe otorgar la ciudadanía automática a niños nacidos en EE.UU. cuyos padres no sean ciudadanos o residentes legales permanentes, o sea con «green card».

La iniciativa de Trump enfrenta desde entonces una fuerte oposición de fiscales generales de estados demócratas y organizaciones de derechos de los inmigrantes.

Estos argumentan que la medida vulnera la 14ª Enmienda de la Constitución de EE.UU., que establece la ciudadanía automática para cualquier persona nacida en el país.

La administración Trump sostiene que esta enmienda no debería aplicarse a inmigrantes en situación irregular ni a quienes tienen estatus temporal, como estudiantes y trabajadores con visa de trabajo o turismo en Estados Unidos.

Con una mayoría conservadora de 6-3, la Corte Suprema incluye en la actualidad a tres jueces designados por Trump, lo que podría favorecer su postura para eliminar la ciudadanía americana por derecho de nacimiento.

Esta acción legal forma parte de una estrategia más amplia para endurecer las políticas migratorias, incluyendo el uso del ejército para reforzar la seguridad fronteriza y restricciones al asilo. Además de vuelos de deportaciones de cientos de miles de inmigrantes que no poseen estatus legal en Estados Unidos.

Muchos cubanos están afectados por estas razones en Estados Unidos, especialmente los cubanos que cuentan con la I-220A.