En los próximos meses, miles de viajeros que usan una de las terminales más concurridas del país encontrarán novedades. No solo afectarán a quienes vuelan a la isla, sino también a quienes tienen rutas hacia América Latina, Europa o cualquier otro destino.
La información oficial habla de una experiencia de viaje más cómoda y fluida. Se incorporará tecnología moderna y se renovarán varias áreas de acceso y control.
El anuncio generó curiosidad entre los pasajeros frecuentes. Muchos quieren saber qué significará para los tiempos de espera y el flujo dentro del aeropuerto.
Este conjunto de cambios forma parte de un proyecto de modernización a gran escala, que avanza por fases y abarcará zonas muy transitadas por el público.
La sala F y un control de seguridad renovado
Se trata del Aeropuerto Internacional de Miami, punto de partida para millones de cubanos naturalizados, residentes y visitantes. La sala F será el primer foco de cambios importantes.
El control de seguridad se trasladará a la segunda planta e incorporará equipos de inspección de última generación. Esto reducirá filas y permitirá un proceso más ágil.
También se mejorarán varias puertas de embarque, optimizando el espacio para una circulación más cómoda. La sala F forma parte de la Terminal Central, junto con los corredores E y G, que atienden vuelos nacionales e internacionales.
Un plan para mover más pasajeros
Con más de 56 millones de viajeros en 2024, el MIA se prepara para atender a un público cada vez más diverso. El objetivo es que los cambios beneficien tanto a quienes viajan por negocios como por turismo.
El aeropuerto anunció que la mayoría de sus ascensores, escaleras mecánicas y pasillos rodantes ya están operativos. Además, renovó el piso de la sala D con terrazo, un material resistente y fácil de mantener.
Proyectos que miran a 2040
El plan incluye nuevos pasillos rodantes que conectarán con el tren, el área de alquiler de autos y el transporte público Skyride.
Uno de los proyectos más ambiciosos será el Pasillo K, que añadirá más puertas de embarque y generará miles de empleos. Con ello, el aeropuerto busca manejar hasta 77 millones de pasajeros y 5 millones de toneladas de carga anuales antes de 2040.