Este 13 de septiembre de 2025 el mercado informal de divisas en Cuba vuelve a marcar cifras récord que reflejan la desconfianza hacia el peso cubano y la presión de una economía cada vez más frágil.
Según los valores compartidos por El Toque en la mañana, el dólar estadounidense se cotiza en 420 pesos, mientras que el euro alcanza los 470, consolidándose como la divisa más cara dentro del mercado negro.
Conversión del dólar estadounidense a pesos cubanos
1 dólar = 420 CUP
10 dólares = 4 200 CUP
20 dólares = 8 400 CUP
30 dólares = 12 600 CUP
50 dólares = 21 000 CUP
100 dólares = 42 000 CUP
Conversión del euro a pesos cubanos
1 euro = 470 CUP
10 euros = 4 700 CUP
20 euros = 9 400 CUP
30 euros = 14 100 CUP
50 euros = 23 500 CUP
100 euros = 47 000 CUP
Conversión de la MLC a pesos cubanos
1 MLC = 200 CUP
10 MLC = 2 000 CUP
20 MLC = 4 000 CUP
30 MLC = 6 000 CUP
50 MLC = 10 000 CUP
100 MLC = 20 000 CUP
Un mercado en tensión constante
Mientras el euro supera la barrera de los 470 pesos, el dólar se mantiene firme en torno a los 420. La Moneda Libremente Convertible sigue muy por debajo de estas cifras, con un valor de 200 pesos, reflejo de su desuso fuera del sistema estatal de tiendas, cada vez más desabastecidas.
Los cubanos enfrentan un panorama en el que los salarios se devalúan con rapidez. Un trabajador que reciba el promedio nacional de poco más de 6 500 pesos apenas logra comprar 15 dólares o 13 euros en el mercado informal. En el caso de los jubilados, con pensiones que rondan los 1 900 pesos, apenas alcanzarían 4 dólares o menos de 3 euros.
Factores que impactan la tasa de cambio
El reciente anuncio de la salida de la central termoeléctrica Antonio Guiteras a finales de año, para un mantenimiento de seis meses, ha generado mayor incertidumbre en la población. Los apagones prolongados, junto con la escasez de alimentos y combustible, incentivan a las familias a refugiarse en divisas extranjeras como mecanismo de ahorro y supervivencia.
En este contexto, el mercado informal de divisas en Cuba se convierte en un termómetro de la crisis: cada subida del dólar o el euro refleja la erosión del peso cubano y la creciente dependencia de las remesas y envíos desde el exterior para sostener la vida cotidiana.