Cada vez más cubanos en proceso de residencia se encuentran transitando la etapa de las huellas biométricas.
Muchos han recibido en las últimas semanas la notificación de acudir a una oficina de USCIS, y la incertidumbre no se ha hecho esperar.
En medio de este escenario, abundan los rumores y la ansiedad. Hay quienes temen que estas citas puedan convertirse en un punto de riesgo para quienes aún no tienen un estatus migratorio definido o enfrentan procesos pendientes en tribunales.
La explicación de un abogado de inmigración
“El nuevo pánico, de este mes, son las huellas”, reconoció el abogado de inmigración Willy Allen en su espacio semanal.
El letrado explicó que decenas de cubanos lo han consultado con la misma pregunta: si estas convocatorias representan una amenaza de detención.
Allen aclaró que no es común que USCIS cite de forma masiva a solicitantes para este trámite, del mismo modo que no lo era, hasta hace poco, que agentes de ICE arrestaran a personas a la salida de una corte tras el cierre de sus casos.
Lo que dicen los especialistas
El abogado afirmó que ha conversado con varios colegas sobre el tema y todos coinciden en lo mismo: nunca han tenido un cliente detenido en una cita de huellas biométricas.
Se trata de un procedimiento técnico y rutinario, indispensable para avanzar en los trámites de residencia.
Sin embargo, el temor se suma a la larga lista de miedos que circulan entre los cubanos en Estados Unidos: arrestos en plena calle, detenciones en cortes, ejecución de órdenes de deportación, y traslados a centros de detención lejanos que complican la defensa legal.
Una preocupación que no cesa
Para muchos, cada carta que llega del gobierno despierta una nueva ola de ansiedad.
Ahora, el turno es para las huellas biométricas, vistas por algunos como una amenaza, cuando en realidad forman parte de un proceso migratorio que, aunque largo y desgastante, sigue siendo el camino necesario hacia la residencia.