La salud pública en Cuba vuelve a estar bajo presión. Lo que antes parecía un repunte aislado se ha transformado en un escenario preocupante que alcanza a buena parte del país.
El doctor Francisco Durán, director de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública, reconoció en televisión que la situación “es más compleja que en meses anteriores”. Y no se trata solo del dengue, también circulan el oropouche y el chikungunya, al tiempo que virus respiratorios complican aún más los diagnósticos.
Dengue en 12 provincias y pacientes graves
El dengue, transmitido por el mosquito Aedes aegypti, se ha expandido hasta 12 provincias, cuando hace poco solo afectaba a 7 u 8. La infestación del vector es tan alta que los ingresos hospitalarios aumentaron y ya hay siete personas en estado grave, aunque ninguna en estado crítico.
Durán recordó que esta enfermedad también es conocida como “fiebre quebranta huesos” por los intensos dolores que provoca. El repunte de casos está directamente relacionado con la acumulación de basura, el calor y las lluvias, factores que siguen sin una respuesta efectiva del gobierno.
Oropouche sin complicaciones, pero en todo el país
El oropouche también circula en 12 provincias. Aunque no provoca casos graves ni complicaciones, preocupa por su rápida propagación. Lo transmite el mosquito culicoides, presente en casi cualquier criadero. Su sintomatología se confunde con otras enfermedades febriles, lo que genera malestar e incertidumbre en la población.
Chikungunya doloroso y en expansión
Lo que empezó en Matanzas, en municipios como Perico y Cárdenas, ya llegó a cinco provincias: Guantánamo, Santiago de Cuba, Pinar del Río y La Habana, donde se reportan casos en Arroyo Naranjo, Cerro y Playa.
El chikungunya, transmitido por el mosquito Aedes albopictus, no ha alcanzado niveles críticos, pero causa dolores articulares tan intensos que muchas personas siguen con molestias incluso después de la fase aguda. El propio Durán lo describió como una enfermedad “muy aparatosa” porque limita la movilidad de quienes la padecen.
Confusión con virus respiratorios
A esta situación se suman otros virus en circulación, como la influenza y el virus sincitial respiratorio. Ambos producen fiebre y malestar general, síntomas que se solapan con los de las arbovirosis. El resultado: diagnósticos más complicados y temor de la población ante una posible saturación de los centros de salud.
Descontento popular y críticas al gobierno
En redes sociales, los cubanos expresan su preocupación y desconfianza. Muchos denuncian la falta de medidas efectivas contra los vertederos y la basura acumulada en las ciudades, principales focos de cría de mosquitos. También circulan rumores de hospitales colapsados y muertes en un solo día, aunque Durán desmintió esas versiones.
Más allá de rumores, lo cierto es que la falta de recursos y la acumulación de problemas ambientales hacen que el panorama sanitario en la isla sea frágil. Como reconoció el propio epidemiólogo, el escenario actual es mucho más complejo que meses atrás, y sin un control real de los criaderos y de la basura, lo peor podría estar por venir.
