El ministro de Energía y Minas de Cuba, Vicente de la O Levy, confirmó varios días después que varios parques de paneles solares del oriente del país resultaron dañados tras el paso del huracán Melissa, reconociendo afectaciones que contradicen los reportes oficiales anteriores sobre daños “mínimos” en la infraestructura energética nacional.Durante una intervención televisiva transmitida por Cubadebate, el titular del sector explicó que, si bien las estructuras metálicas resistieron la fuerza de los vientos, “algunos paneles se dañaron” y se registraron niveles considerables de inundación.
Esta situación obligó a desconectar temporalmente varios sistemas para evitar cortocircuitos y preservar la seguridad del personal técnico.
“Como hemos dicho en otras ocasiones, hay que buscar el aislamiento para no provocar después cortocircuito por el tema del agua”, señaló De la O Levy, quien precisó que los recorridos de evaluación incluyeron las provincias de Holguín, Granma y Santiago de Cuba.
Las zonas entre Cacocum y Bayamo fueron algunas de las más afectadas, con reportes de parques fotovoltaicos completamente anegados.
El ministro también reconoció problemas adicionales en la planta termoeléctrica de Felton, donde los pozos de enfriamiento quedaron inundados, y mencionó la caída de varias torres de transmisión eléctrica entre Cueto y Bayamo, afectando el suministro en parte del oriente cubano.
Estas declaraciones contrastan con las ofrecidas días antes por el presidente Miguel Díaz-Canel, quien había asegurado que las afectaciones en los parques solares fueron “mínimas” y destacó la “resistencia y efectividad” del sistema eléctrico nacional.
No obstante, imágenes difundidas en redes sociales mostraron el Parque Solar Fotovoltaico Camilo Cienfuegos, en Río Cauto (Granma), completamente bajo el agua y fuera de servicio.
La Unión Eléctrica de Cuba (UNE) había insistido en que los paneles solares estaban protegidos bajo “normas internacionales” y podían soportar vientos de hasta 228 kilómetros por hora.
Sin embargo, los daños revelan la vulnerabilidad del sistema ante fenómenos meteorológicos extremos, en un contexto de crisis energética y falta de mantenimiento estructural.

Todo lo tergiversar: en una evaluación inicial, lo que explicaron fue que pasaron por una prueba fuerte y demostraron su fortaleza ante los vientos, que de los dos visitados hasta ese momento sólo un soporte del panel se había doblado y un panel se medio que aflojó. Después de que se secaran habría que valorar otros daños. Plantearon además que faltaba visitar otros paneles. Primero hay que seguir las noticias y después opinar.