¿Cambio real o estrategia? Chocolate MC dice haber encontrado a Dios desde prisión tras su veredicto de culpabilidad. Más detalles de inmediato. El reguetonero cubano Chocolate MC, cuyo nombre real es Yosvanis Sierra Hernández, asegura estar viviendo una transformación espiritual profunda desde la cárcel de TGK en Miami-Dade.
Tras ser declarado culpable por solicitar el asesinato de Damián Valdez Galloso —vinculado al caso del homicidio del artista El Taiger—, el músico afirma haber dejado atrás su etapa como santero para abrazar la fe cristiana.
Sin embargo, la pregunta que muchos se hacen es inevitable: ¿es un cambio auténtico o una reacción emocional al proceso judicial que podría llevarlo a cadena perpetua?
En una entrevista telefónica con Noticias 23, el cantante describió cómo el encierro lo llevó a un periodo de introspección y ruptura personal.
“Estoy aquí solo, con mi televisor, recibiendo mis tres comidas, las visitas del psiquiatra, de los trabajadores sociales y del capellán que viene a enseñarme la palabra de Dios”, relató.
Según él, las alabanzas son ahora su refugio emocional: “Me paso el día cantando alabanzas; lloro cuando canto porque son canciones gloriosas”.
El artista reconoce que antes de su arresto vivía sumido en las drogas y el descontrol. Asegura que el asesinato de El Taiger —que lo afectó profundamente— lo empujó al límite.
“Perdí el timón de mi vida”, confesó. Desde su celda, afirma haber encontrado una razón espiritual para seguir adelante y dice haber aprendido a perdonar incluso a quienes le hicieron daño.
Pero el contexto legal no deja espacio para el optimismo. El jurado lo declaró culpable tras ver un video presentado por la fiscalía en el que, según la acusación, hablaba de pagar por el crimen.
Él insiste en que fue malinterpretado: “No me expresé correctamente, pero no soy capaz de matar a nadie”.
Su familia sostiene que hubo irregularidades en el juicio y ha impulsado una campaña con miles de firmas para solicitar una condena alternativa enfocada en rehabilitación.
Testigos y cercanos, incluida la cantante La Diosa, señalaron su historial de adicción como un factor determinante en su comportamiento.
La mayor incógnita sigue intacta: ¿es esta conversión religiosa una transformación genuina o una respuesta al miedo, la culpa y la presión del proceso judicial?
La historia de Chocolate MC se mueve entre la severidad del veredicto y la narrativa espiritual que intenta construir desde prisión. Solo el tiempo dirá si este giro en su fe es una evolución real o un capítulo más en la compleja vida del artista del reguetón y el reparto cubano.