El arroz es, de entre todos los alimentos, la base de la alimentación de los cubanos. Por eso cuando el producto escasea de manera sostenida como en las últimas semanas los precios se disparan con costes prohibitivos psra una buena parte de la población.
Los cubanos viven días de incertidumbre mientras uno de los alimentos más básicos vuelve a encarecerse. En barrios de La Habana y otras provincias, la búsqueda de arroz se ha convertido en una tarea cada vez más difícil. Las ofertas aparecen y desaparecen rápido, con precios que cambian según la zona y la calidad del grano.
En los últimos días, anuncios en redes y sitios de compraventa muestran cuánto se ha encarecido el producto. Las variaciones son amplias, pero la tendencia es clara: el arroz está más caro, más escaso y más inestable que semanas atrás.
Precios del arroz por libra en La Habana
En la venta minorista, los precios se mantienen por lo alto. Las ofertas de arroz criollo rondan los 230 CUP por libra, mientras que el importado se comercializa entre 280 y 300 CUP por libra, según múltiples publicaciones recientes. Para muchos vendedores, ese rango ya es el nuevo estándar.
Las imágenes compartidas en redes muestran sacos abiertos y grano suelto ofrecido por libra, una escena habitual cuando el producto escasea o llega por canales informales. Vendedores del Vedado, Playa, Arroyo Naranjo y otros municipios coinciden en valores similares y piden contacto por WhatsApp para cerrar las ventas con rapidez.
El mercado mayorista también sube
Los precios mayoristas tampoco alivian la situación. Los sacos de 25 kilogramos aparecen entre 33 USD o su equivalente en moneda nacional, siempre por encima de la tasa informal. Otros vendedores ofertan arroz estadounidense o tailandés en sacos de 50 lb, con precios entre 13200 CUP y 15050 CUP, según la marca y la calidad.
Estos valores muestran un encarecimiento constante. Al dividir el precio total del saco por su peso, el costo final por libra supera con facilidad los 250 CUP incluso antes de la reventa, lo que explica los precios actuales en el mercado minorista.
Una demanda que supera la oferta
La situación se agrava porque el arroz local está cada vez menos disponible. La producción nacional no cubre las necesidades básicas y las importaciones llegan a cuentagotas. Esto provoca que cualquier lote que aparece en manos privadas se venda enseguida, muchas veces con compra mínima de varios sacos.
Varios anuncios también advierten que la mensajería tiene costo adicional, una señal del nivel de demanda y de la rapidez con la que se mueve el producto. Para muchas familias, conseguir arroz se ha vuelto una carrera diaria en medio de una oferta limitada y precios que continúan al alza.
Un cierre de año complicado para los hogares cubanos
Mientras se acerca fin de año, el arroz —presente en la mesa de casi todos los cubanos— sigue subiendo sin freno. Las referencias muestran un mercado dominado por valores altos, poca estabilidad y mucha especulación. Y aunque algunos vendedores aseguran contar con “producto listo en almacén”, nunca dura demasiado.
Sin señales claras de mejoría, el arroz podría convertirse en uno de los alimentos más difíciles de asegurar en diciembre, justo cuando más aumenta el consumo familiar.