La disponibilidad de gas licuado vuelve a generar preocupación en varias provincias cubanas. En los últimos días, los comentarios en redes sociales reflejan malestar por la escasez y por el aumento de precios en el mercado negro.
Las quejas se repiten con fuerza en zonas donde la distribución no ha retomado la regularidad. Muchas familias aseguran que la situación se ha vuelto insostenible.
Distribución desigual entre provincias
En Santiago de Cuba, Cupet informó la salida diaria de carros hacia varios puntos de venta. Según las notas publicadas, cada punto recibiría como mínimo 160 cilindros llenos y se liberarían 100 turnos por la plataforma Transfermóvil.
Sin embargo, ese panorama no se repite en todo el país. Usuarios de Camagüey y Matanzas denuncian que llevan meses sin acceso al gas licuado.
En Matanzas, varios comentarios coinciden en una misma fecha. Aseguran que desde octubre no se realiza venta alguna en municipios como Cárdenas.
La División Territorial de Comercialización de Combustibles en Guantánamo informó los detalles del reinicio de la venta de Gas Licuado previsto desde este sábado.
- En el punto 7 Oeste se atenderá a los 93 clientes que tenían turnos asignados en el último día de venta y no pudieron comprar.
- En el caso de 5 Sur, la venta comenzará con 80 clientes que no adquieren el producto desde el 9 de junio hasta la fecha. Una vez concluido ese grupo, se continuará con los 50 turnos ya asignados.
- El punto del Centro venderá un total de 60 turnos.
Según la nota oficial, en todos los puntos se priorizará la atención a 10 personas en situación de discapacidad, comenzando por el número 1 de los listados. También se atenderán tres casos vulnerables y dos trabajadores por cuenta propia.
Precios en alza en el mercado informal
La escasez ha tenido un efecto inmediato fuera de los canales oficiales. En el mercado negro, los precios del gas licuado vuelven a dispararse.
Al no existir una oferta estable, muchas personas se ven obligadas a pagar cifras muy superiores a las oficiales. Para quienes dependen del gas para cocinar, la alternativa es limitada.
Esta situación golpea con más fuerza a adultos mayores, personas encamadas y familias sin contrato formal de gas.
Reclamos y testimonios en redes sociales
Las redes sociales se han convertido en el principal espacio para expresar inconformidades. Un mensaje publicado desde Camagüey resume el sentir de muchos vecinos.
“Buen día para todo el grupo. Esperemos que den la noticia de la llegada del gas por los canales de TV Camagüey, Noticiero Nacional, Cadena Agramonte, la página de Telegram o Facebook. Se sabe que una gran población utiliza el gas licuado”, escribió una usuaria.
En Matanzas, la angustia es aún más evidente. Una internauta comentó: “Cuando van a vender en Cárdenas tengo a mi mamá encamada y desde octubre final presenté el certificado médico de postrada. ¿Qué hacer ahora?”.
Otros usuarios señalan la falta de información clara y la ausencia de fechas concretas para la reanudación de la venta.
Temores por el suministro futuro
Entre los comentarios también aparecen preocupaciones sobre el abastecimiento a corto plazo. Algunos usuarios temen que la disponibilidad pueda reducirse aún más.
Varias publicaciones mencionan el contexto internacional y expresan inquietud por posibles afectaciones al suministro de combustible hacia Cuba. Estas opiniones reflejan percepciones ciudadanas, no comunicados oficiales.
La incertidumbre aumenta ante la cercanía de fin de año, un período en el que el consumo doméstico suele crecer.
Una situación que sigue sin respuesta clara
Mientras en Santiago de Cuba se reporta venta diaria, otras provincias continúan sin noticias concretas. La diferencia en la distribución alimenta el descontento.
Para miles de hogares, el gas licuado no es un complemento, sino una necesidad básica. La falta de estabilidad en su suministro mantiene en vilo a buena parte de la población.
Por ahora, los ciudadanos esperan información oficial que confirme cuándo se normalizará la distribución y si habrá un reparto equitativo entre todas las provincias.