La Unión Cuba-Petróleo logró en 2025 un punto de inflexión tras más de una década de caída sostenida en la extracción de crudo y gas. El incremento es real y medible, aunque sigue lejos de cubrir las necesidades del país.
Los propios especialistas del sector reconocen que el crecimiento productivo no alcanza todavía para sostener, por sí solo, la generación eléctrica ni el resto de la economía nacional.
Se detiene un declive que duró más de una década
Durante 13 años consecutivos, desde 2012, los indicadores de producción de crudo y gas mostraron una tendencia negativa. En 2025, ese comportamiento se frenó por primera vez.
CUPET completó su plan anual de petróleo crudo el pasado 17 de diciembre. Desde esa fecha y hasta el cierre del año, los niveles diarios de extracción se mantuvieron por encima de lo planificado.
La estimación oficial apunta a un cierre de 2.2 millones de toneladas de crudo y gas, unas 80000 toneladas más que el plan previsto y también por encima del volumen alcanzado en 2024.
Más producción, pero insuficiente para el sistema eléctrico
A pesar del incremento, directivos del sector advierten que la producción nacional no cubre la demanda del país. Prácticamente todo el crudo extraído se destina a la generación eléctrica.
Ese aporte resulta clave, pero no alcanza para cubrir la demanda total. Cuba continúa dependiendo de importaciones de crudo para sostener la generación y para los procesos de refinación.
Según explicaron los expertos, para lograr independencia energética en términos de crudo sería necesario casi triplicar los niveles actuales. En la práctica, la producción nacional apenas cubre alrededor de una tercera parte de la demanda.
Esta realidad explica por qué, a pesar del aumento productivo, persisten los apagones en gran parte del país.
Nuevos pozos impulsan la producción de gas natural
El crecimiento también se apoya en la perforación de cuatro nuevos pozos en los últimos tres años, ubicados en Puerto Escondido y Canasí. Entre todos aportan más de 1 millón de metros cúbicos diarios de gas natural.
Para 2025, CUPET estima cerrar con una producción acumulada de 1130 millones de metros cúbicos de gas natural, un nivel que no se alcanzaba desde hace nueve años.
Durante el año, la producción diaria superó de forma sostenida los 3 millones de metros cúbicos. En términos energéticos, ese volumen equivale a unas 2800 toneladas adicionales de crudo por día.
Impacto directo en plantas y territorios
El mayor suministro de gas permitió aprovechar mejor las capacidades instaladas en plantas como Boca de Jaruco y Puerto Escondido, que hasta 2022 operaban a la mitad por falta de combustible.
Occidente lidera la extracción de gas natural, mientras que la zona central destaca en la producción de crudo. En provincias como Ciego de Ávila, aunque los volúmenes son menores, el aporte sigue siendo relevante.
Ese crudo se refina en Cabaiguán y resulta esencial para derivados específicos, como aceites dieléctricos usados en transformadores eléctricos.
Un recurso estratégico en medio de la crisis energética
Hoy, la electricidad generada a partir de crudo y gas nacional representa más del 55 por ciento de la matriz eléctrica del país. Sin ese aporte, la situación del sistema eléctrico nacional sería considerablemente más grave.
CUPET mantiene activos estudios e investigaciones para identificar nuevas zonas con potencial productivo, un proceso que continuará en los próximos años, según adelantaron fuentes del sector