La policía de Holguín detuvo a un trabajador de la zona turística de Guardalavaca por robar alimentos y bebidas del hotel donde trabajaba. El empleado fungía como comprador de su centro recreativo y fue arrestado el pasado 15 de julio en pleno viaje hacia La Habana. En el arresto se decomisaron las mercancías que se había apropiado del hotel. Así se publicó en el perfil de Facebook “El Cubano Fiel”, una de las numerosas páginas en redes sociales vinculadas al Ministerio del Interior (MININT).

Apenas se produjo la detención, las autoridades encargadas de esclarecer el hecho realizaron un registro a la vivienda del implicado. En el domicilio se le ocuparon varios productos de la misma procedencia.

Por ejemplo, en la lista de decomiso aparecen rones, cervezas de varias marcas reconocidas internacionalmente, cárnicos de alta calidad, queso y latas de pintura. La policía investiga ahora la cadena delictiva de la cual deben surgir otras personas vinculadas a estos delitos. 

Delitos por doquier

Los robos, acaparamientos y reventas, entre otros hechos, continúan acaparando la atención de los residentes en la Isla. Justo hace una jornada, también el propio perfil de Facebook dio cuenta de la detención de un residente en La Habana por vender aceite a precios abusivos. 

Al realizarse un registro en la vivienda del sospechoso se encontraron muchos envases con aceite comestible. Sus vecinos confirmaron la actividad delictiva que ejercía Víctor, ahora detenido e investigado por la policía de la capital cubana. 

Sobre los hurtos en unidades de comercio de la Isla, la ministra del ramo, Betsy Díaz Velázquez, confirmó que hasta mayo se cometieron 361 robos con fuerza en las bodegas cubanas.

Precisamente los robos de aceite comestible se han vuelto frecuentes en las fábricas donde se elabora el producto. Generalmente, los trabajadores del lugar se hacen cómplices de personas externas al centro.