El grupo empresarial Correos de Cuba ha reconocido ante sus clientes que no pueden ser eficientes en su servicio. 

Aunque la entidad ha declarado en numerosas ocasiones que se han visto sobrepasados por el incremento de la demanda a raíz de la crisis sanitaria y económica, la ineficiencia de sus servicios es bien añeja. 

Correos de Cuba es una empresa que ingresa millones gracias al aumento de los envíos de paquetería a la isla y aun así no puede proporcionar prestaciones de calidad a sus clientes. 

En una reciente publicación hicieron referencia a la ampliación de sus servicios a domicilio en las diferentes provincias y municipios del país, gracias a una alianza con Copextel. Y las críticas no se hicieron esperar. 

“Si no pueden garantizar que los paquetes internacionales lleguen en tiempo y forma, ¿cómo garantizarán que estos servicios sean eficientes?”, cuestionó una cliente. 

Desde Correos de Cuba se justificaron alegando que “en las condiciones financieras y de limitaciones con el combustible que hoy tiene el país eso no será posible porque ello tiene un impacto negativo directo en la calidad del servicio”. 

Antes de la nueva crisis de combustible, los envíos aéreos desde España, por ejemplo, llegaban alrededor del mes. Hoy te advierten que pueden tardar hasta 45 días. Los clientes de Correos de Cuba saben que ese retraso puede hacerse aún mayor. 

CORREOS DE CUBA

En este escenario, el gobierno cubano parece haberle “quitado al pie” a Correos de Cuba y las agencias de paquetería. Es hasta lógico asumir que si otras producciones prioritarias están paralizadas, trasladar paquetes no desvele a ninguna autoridad. Excepto, obviamente, a quienes envían mercancía básica y necesaria a sus familiares, a costa de un gran sacrificio personal, para no recibir el servicio que merecen. 

Por si fuera poco, continúan las denuncias de robo de paquetes. En fecha reciente, un cliente reclamó: “quisiera alertarlos para que tomen medidas porque hoy llegó a casa un paquete enviado desde Italia roto y además robaron contenido. Me parece injusto e inescrupuloso que aún sucedan estas cosas”.