El Sistema Eléctrico Nacional comenzó este 15 de agosto con un panorama que no deja espacio para el optimismo. Las afectaciones se mantuvieron durante toda la jornada anterior y se extendieron sin pausa a la madrugada de hoy.
La máxima afectación del jueves fue de 1611 megavatios a las 10 de la noche, un momento que ni siquiera coincidió con el horario de mayor demanda. El déficit se agravó por la salida de la unidad 5 de la termoeléctrica de Nuevitas y la unidad 3 de Renté.
Energía solar, insuficiente para compensar
Los 25 nuevos parques solares fotovoltaicos aportaron 2674 megavatios hora, con un pico de 451 megavatios en el horario de mayor producción. Sin embargo, esta cifra no logra cubrir las pérdidas de las principales plantas térmicas fuera de servicio.
Estado actual de la red
A las seis de la mañana, la disponibilidad del SEN era de apenas 2000 megavatios frente a una demanda de 3150. Esto provocaba un déficit de 1175 megavatios y una afectación prevista para el horario diurno de 1100 megavatios.
Termoeléctricas y grupos electrógenos fuera de servicio
Entre las unidades averiadas se encuentran la número 8 de la CTE Mariel, la 5 de Nuevitas, la 3 de Renté y la 2 de Felton. Permanecen en mantenimiento la unidad 2 de Santa Cruz, la 4 de Carlos Manuel de Céspedes en Cienfuegos y la 5 de Renté. A esto se suman 340 megavatios limitados por problemas térmicos.
Falta de combustible agrava la crisis
Un total de 57 centrales de generación distribuida permanecen apagadas por falta de combustible, con una capacidad fuera de servicio de 368 megavatios. Solo se prevé la entrada de 50 megavatios en motores distribuidos para el horario pico.
Pronóstico para la noche
En el horario pico se estima una disponibilidad de 2050 megavatios frente a una demanda máxima de 3700. Esto significa un déficit de 1650 megavatios y una afectación que podría llegar a los 1720 megavatios, siempre que las condiciones no empeoren.
La realidad es que, entre averías, mantenimientos y la falta de combustible, Cuba se encamina a otro día marcado por apagones prolongados y temperaturas sofocantes.