El sistema eléctrico cubano continúa sin dar respiro. Este miércoles, el servicio estuvo interrumpido durante las 24 horas y se mantuvo afectado en la madrugada de hoy. El déficit volvió a superar lo previsto por las autoridades.
Afectaciones superiores a lo planificado
La mayor afectación registrada ayer alcanzó los 1725 MW a las 8:30 de la noche. Este momento no coincidió con el pico de consumo. La situación empeoró por la salida de los motores del Fuel de Mariel, lo que redujo aún más la capacidad de generación disponible.
En paralelo, los 25 parques solares fotovoltaicos en operación generaron 2762 MWh. Durante las horas de mayor radiación solar entregaron un máximo de 514 MW, una cifra que, aunque importante, no compensa las pérdidas de las plantas térmicas.
Disponibilidad insuficiente desde temprano
A las seis de la mañana, el SEN contaba con 2240 MW de capacidad disponible frente a una demanda de 3041 MW. Esto dejó un déficit de 836 MW. Para el horario del mediodía, se calculaba una afectación cercana a los 900 MW, lo que confirmaba que la tensión en el sistema continuaría.
Fallos y mantenimientos en plantas clave
Entre las incidencias principales figura la avería de la Unidad 2 de la CTE Felton. Permanecen en mantenimiento la Unidad 2 de la CTE Santa Cruz, la Unidad 4 de la CTE Carlos Manuel de Céspedes en Cienfuegos y la Unidad 5 de la CTE Renté.
A estas salidas se suman 481 MW fuera de servicio por limitaciones térmicas. También hay problemas de combustible que afectan a 56 centrales de generación distribuida, con una pérdida de 309 MW adicionales.
Pronóstico sombrío para el horario pico
En las horas de mayor consumo se espera una disponibilidad de 2240 MW y una demanda máxima de 3700 MW. Esto representa un déficit de 1460 MW y un pronóstico de afectaciones que podría alcanzar los 1530 MW.
Con estas cifras, Cuba enfrenta otra jornada marcada por apagones extensos, calor sofocante y sin señales de que la situación mejore a corto plazo.