La Unión Eléctrica destacó este 26 de agosto que los 25 parques solares fotovoltaicos en funcionamiento aportan más de 500 MW de potencia en horario del mediodía, lo que ayuda a reducir parcialmente el déficit de generación. Sin embargo, este alivio es solo temporal y no logra frenar la ola de apagones que afecta al país de manera constante.
Un aporte significativo en las horas de sol
Según explicó a Granma el ingeniero Mario Castillo Salas, director adjunto de la UNE, los parques solares entregan más de 2570 MWh en promedio diario, cifra que incluso supera lo inicialmente estimado.
El funcionario señaló que sin esta capacidad, “las afectaciones serían mayores”, pues la energía solar permite cubrir una parte de la demanda en los momentos de mayor consumo diurno.
La experiencia de Ciego de Ávila
En Ciego de Ávila, los parques fotovoltaicos instalados aportaron más de 16 500 MWh en julio y lo que va de agosto, de acuerdo con Lexter Arencibia Bacallao, director del despacho provincial de Carga.
Ese volumen de energía permitió ahorrar alrededor de 4290 toneladas de combustible y evitar la emisión de unas 140 000 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera.
Actualmente, se construyen nuevas instalaciones en Morón y Majagua, que deberán aportar otros 26,8 MW de potencia una vez concluidas.
Un alivio momentáneo frente a una crisis prolongada
Pese a los beneficios ambientales y al ahorro de combustible, el aporte solar no logra modificar la realidad de la población cubana. Los apagones continúan durante la tarde, la noche y la madrugada, cuando el sol ya no sostiene la generación.
En los últimos partes oficiales, la UNE ha pronosticado afectaciones en el rango de 1600 a 1800 MW durante el horario pico, lo que deja a casi la mitad del país sin electricidad cada día.
En este contexto, la energía solar representa un respiro limitado en las horas de sol, pero está lejos de ser la solución definitiva a una crisis energética que sigue golpeando a millones de hogares en toda la isla.