Las autoridades federales confirmaron varias detenciones, algunas de ellas de ciudadanos cubanos.
Los arrestos ocurrieron sin previo aviso, en un punto habitual de paso para quienes viajan por la US 1.
Operativo en plena mañana
El despliegue ocurrió el 21 de noviembre durante una acción conjunta entre la Oficina de Operaciones Aéreas y Marinas de ICE y agentes de Aduanas y Protección Fronteriza.
La intervención se desarrolló a la altura del marcador de la milla 105, frente al supermercado Winn-Dixie de Key Largo, donde testigos contaron que se detuvieron vehículos en dirección sur y se habilitaron varios puntos de control.
Las autoridades informaron que los doce arrestados estaban en Estados Unidos sin autorización migratoria. Procedían de distintos países, entre ellos Nicaragua, Cuba, Venezuela, Colombia y Guatemala.
Helicóptero y controles en la US 1
El operativo incluyó un helicóptero Blackhawk que sobrevoló la zona y apoyó las verificaciones en carretera.
Agentes federales revisaron documentos, interceptaron vehículos y verificaron identidades en un tramo con alto flujo de residentes y trabajadores que se desplazan entre los Cayos.
Antecedentes penales entre los detenidos
La información divulgada por CBP indica que todos los arrestados tenían antecedentes penales.
Entre los cargos previos mencionados figuran reingreso ilegal al país tras una deportación, conducir bajo los efectos del alcohol, porte ilegal de arma, posesión de drogas con un arma, agresión y violencia doméstica.
Cubanos entre los procesados
Las autoridades no detallaron cuántos cubanos había dentro del grupo, pero confirmaron la presencia de “varios” ciudadanos de la isla.
Los doce detenidos fueron trasladados a la estación de la Patrulla Fronteriza en Marathon, donde se iniciaron los procesos de deportación correspondientes.
Hasta el momento, ninguno de los casos aparecía en los registros judiciales federales consultados.
Próximos pasos
Los expedientes seguirán su curso en las próximas semanas mientras se definen las acciones de deportación para cada uno.
El operativo refuerza la línea más estricta aplicada en los últimos meses en la zona sur de Florida, donde los controles migratorios se han vuelto más frecuentes.