La actividad telúrica en la región suroriental volvió a mostrar variaciones en las últimas horas. El comportamiento registrado no sorprendió a los especialistas, aunque las zonas tradicionales de mayor vigilancia repitieron presencia.
El parte reciente del Servicio Sismológico Nacional abarcó el periodo entre el 4 y el 5 de diciembre. En ese lapso se mantuvo el monitoreo habitual sobre el arco sur de Cuba y su conexión con el Caribe.
Zonas con mayor número de reportes
El documento confirmó que varias áreas conocidas por su historial sísmico concentraron la mayoría de los eventos localizados. Entre ellas aparecen Santiago-Baconao, Pilón-Chivirico y Cabo Cruz, con registros que reflejan movimientos de baja magnitud, pero constantes.
En Santiago-Baconao se identificaron siete sismos entre 1.5 y 2.3 de magnitud. Pilón-Chivirico reportó cuatro movimientos entre 1.0 y 2.2. Cabo Cruz presentó dos eventos comprendidos entre 2.8 y 3.0. También se informó un sismo en Paso de los Vientos-Gran Inagua, con magnitud 3.2, y dos más en la zona de Caimán, entre 2.7 y 3.0.
Los puntos visibles en el mapa incluido en el informe muestran la acumulación de eventos al sur de Oriente, así como actividad dispersa en áreas cercanas a la placa del Caribe.
Eventos significativos fuera del país
El parte destacó tres sismos con magnitud igual o superior a 3.5 en el Caribe. El primero ocurrió en las Islas Vírgenes, con magnitud 3.8 y profundidad de 117 kilómetros. El segundo se registró en Puerto Rico con magnitud 3.7 a 32 kilómetros de profundidad. El tercero tuvo lugar en República Dominicana, alcanzó 3.6 y una profundidad de 53 kilómetros.
Aunque estos eventos no guardan relación directa con fallas dentro del territorio nacional, forman parte del seguimiento regional que mantiene el Servicio Sismológico Nacional.
Información oficial del reporte
El monitoreo estuvo a cargo de la técnica de guardia Ana María Vázquez Villavicencio y del técnico de guardia Oscar Cutie. La emisión provino de la Estación Central del Servicio Sismológico Nacional.