«Lightyear», la nueva película de Disney-Pixar protagonizada por Chris Evan fue prohibida en más de catorce países, incluyendo Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait y otras naciones de Asia Occidental, porque “incumple las normas relacionadas con los medios en el país”.

Resulta que en el filme se incluye una escena en la que el personaje de Alisha, comandante de Buzz Lightyear, se casa con su pareja, forman una familia y se dan un beso en la boca como muestra de afecto. Son dos animados mujeres.

Estas naciones han censurado la película y no será ni proyectada en los cines, ni mucho menos televisada, por incluir contenido LGBT+, ya que la homosexualidad es considerada un crimen en muchos países de Oriente Medio y ha sido acusada de “insultar a los musulmanes y al Islam”.

La propia cadena de televisión Al Arabiya ha aclarado que cualquier contenido que se considere como una ofensa a las creencias islámicas, que «viola la moral pública» o «confunde al público» puede ser libremente censurada en estas naciones islámicas.

«La Oficina de Regulación de Medios anuncia que la película de animación Lightyear, que iba a ser estrenada el 16 de junio, no cuenta con permiso para su emisión en público en todos los cines de EAU debido a su violación de los estándares sobre contenido en medios en el país», explicó el medio en su cuenta de Twitter.

ANIMADO «LIGHTYEAR»: CONTRA CENSURA Y HOMOFOBIA

En algún momento, la escena en cuestión fue borrada de la cinta, pero la insertaron de nuevo cuando los animadores de Pixar criticaron a Disney por «censurar el afecto gay», según destacó la revista Variety.

Los empleados denunciaron mediante una carta que la compañía había reclamado recortes en «prácticamente todos los momentos de afecto abiertamente gay, independientemente de las protestas de los equipos creativos y la cúpula ejecutiva de Pixar».

«En Pixar hemos presenciado personalmente bellas historias, llenas de personajes diversos, ser devueltas con recortes y convertidas en cascotes tras la revisión de las filas corporativas de Disney. Incluso si crear contenido LGBTI+ fuera la respuesta a la hora de arreglar la legislación discriminatoria en el mundo, se nos impide crearlo», dijeron.

Ante la petición de China de que se recortara la cinta en ese momento del beso la productora Galyn Susman ratificó su postura durante el preestreno de la película en Londres.

“No vamos a eliminar nada, especialmente algo tan importante como la relación amorosa e inspiradora que le muestra a Buzz lo que se está perdiendo por las decisiones que toma, así que eso no se eliminará”, concluyeron.