El euro, el dólar y el MLC mantienen valores similares a jornadas anteriores en el mercado informal cubano, pero ¿hasta cuándo durará esta aparente calma? Conoce en este artículo los valores actualizados de cada divisa.

Este domingo 29 de junio de 2025, las principales divisas extranjeras amanecen con valores similares a los reportados durante la última semana, lo que sugiere una momentánea estabilidad dentro del volátil mercado informal cubano. Sin embargo, algunos analistas no descartan nuevas fluctuaciones en los próximos días, dadas las tensiones económicas acumuladas.

Según el monitoreo diario del sitio independiente El Toque, el euro (EUR) se mantiene firme en los 420 pesos cubanos (CUP), consolidándose como la divisa más fuerte en el mercado informal. El dólar estadounidense (USD) conserva su posición en 380 CUP, mientras que el MLC —clave para las compras en tiendas estatales— continúa rondando los 260 CUP.

Por su parte, el dólar canadiense (CAD) se intercambia a 265 CUP, y el peso mexicano (MXN) registra un ligero ascenso, situándose en 20.50 CUP, tras una suma de medio peso respecto al día anterior. El servicio Zelle, cada vez más usado para enviar remesas desde el exterior, registra hoy un valor de 375 CUP, estable respecto a jornadas anteriores luego de la caída registrada hace pocos días.

Tasas oficiales publicadas por el Banco Central de Cuba

Mientras tanto, las tasas oficiales publicadas por el Banco Central de Cuba (BCC) se mantienen estáticas y muy por debajo del valor real del mercado informal. El dólar oficial se mantiene en 120 CUP, el euro en 140.70 CUP, el CAD en 87.80 CUP y el peso mexicano en apenas 6.37 CUP. Estos valores estarán vigentes, según lo establecido, hasta el 30 de junio.

Si bien no se han registrado cambios abruptos en las últimas horas, el valor del peso cubano (CUP) sigue siendo frágil. La escasez de divisas en el sistema bancario oficial y la persistente inflación interna hacen que muchos cubanos recurran cada vez más al mercado informal para satisfacer necesidades básicas, realizar trámites internacionales o simplemente resguardar valor.

Esta calma relativa no significa necesariamente estabilidad: muchos la interpretan como la «pausa antes de la tormenta», en un escenario económico que aún no encuentra señales firmes de recuperación. Por ahora, la población sigue ajustándose día a día al valor que marca la calle —y no el Estado— como referencia real de la economía.