Juicio contra el exministro cubano Alejandro Gil concluye entre secretismo y falta de cobertura oficialista al importante tema. El juicio contra el exministro de Economía de Cuba, Alejandro Gil Fernández, concluyó este jueves en La Habana tras varios días marcados por el hermetismo oficial y la ausencia de prensa que reportara el importante acontecimiento para la nación.
El proceso, realizado en el Tribunal de Marianao y supervisado por el Tribunal Supremo Popular, quedó oficialmente “concluso para sentencia”, según confirmó el periodista Mario J. Pentón a través de sus redes sociales.
No obstante, una nota de la agencia española EFE aseguró que «el tribunal no indicó si el caso había quedado visto para sentencia».
Gil Fernández enfrenta un amplio expediente penal que incluye cargos de espionaje, malversación, cohecho, evasión fiscal, lavado de activos, falsificación de documentos públicos, tráfico de influencias y delitos contra la actividad económica y la contratación.
Estas acusaciones, catalogadas en parte como “delitos contra la seguridad del Estado”, han sido manejadas con absoluto secretismo, en línea con los patrones habituales del sistema judicial cubano cuando procesa casos de alto perfil político.
Durante las jornadas del juicio, el acceso al tribunal estuvo fuertemente controlado, con presencia mínima de familiares. La falta de transparencia ha provocado fuertes críticas, especialmente desde el entorno del propio exministro.
En declaraciones ofrecidas al youtuber Darwin Santana, María Victoria Gil, hermana de Alejandro Gil y expresentadora de televisión, denunció el carácter cerrado del proceso.
“Se celebró el juicio a puertas cerradas, con un despliegue de seguridad enorme tanto para el pueblo como para la prensa, y con un absoluto secretismo”, afirmó visiblemente afectada.
La familia asegura sentirse “traicionada y excluida”, debido a que solo uno de los sobrinos del exministro pudo estar presente en sala, y sin acceso a información relevante. “No se le ha permitido a mi sobrina entrar… solamente ha podido entrar mi sobrino, que no ha dicho absolutamente nada”, lamentó María Victoria.
La expectativa ahora se centra en el fallo final, cuya fecha aún no ha sido anunciada. El caso de Alejandro Gil, considerado uno de los hombres fuertes del gobierno durante años, podría convertirse en uno de los procesos más emblemáticos del sistema judicial cubano en 2025.

un juicio sin derechos como todos los en los sistemas totalitarios
tribunal supremo popular???… no!!!… tribunal supremo del estado!!!… popular???!!!… ahí no fué nadie del pueblo, eso fue todo el tiempo hermético… nadie se enteró de nada… el pueblo no sabe ni pizca de como fué el juicio!!!…
No pudo entrar la COTORRA busca visa.