Cuba: compra menos alimentos, pero más autos a Estados Unidos

Un informe oficial reciente reveló que desde Cuba se han comprado menos alimentos, pero más autos este año a Estados Unidos, a pesar de la necesidad alimenticia actual.

Un informe reciente del Consejo Comercial y Económico EE.UU.-Cuba (CubaTrade) reveló que, hasta agosto de 2024, Cuba ha invertido más de 40 millones de dólares en la adquisición de automóviles usados, superando con creces la cantidad destinada a la compra de alimentos, como el pollo.

De acuerdo con el informe, en agosto pasado las importaciones de vehículos usados alcanzaron un valor de $8.688.439, más del doble de lo registrado en julio, que fue de $3.705.643. En total, estas importaciones han sumado $43.275.516 en lo que va del año.

“Las ventas de vehículos a Cuba son una de las grandes historias de este año”, afirmó John S. Kavulich, presidente de CubaTrade.

Cuba compra menos alimentos, pero más autos a Estados Unidos

En contraste, las compras de alimentos y productos agrícolas no mostraron un aumento significativo, pasando de $31.457.528 en julio a $37.729.568 en agosto.

Sin embargo, esta cifra representa una disminución del 5,4% en comparación con agosto de 2023, cuando las importaciones fueron de $39.913.983.

En general, las importaciones totales de Cuba desde Estados Unidos entre enero y agosto de 2024 alcanzaron los $279.815.521, cifra que es inferior a la del mismo periodo de 2023, cuando se registraron $232.487.373.

Este informe se basa en datos sobre exportaciones de productos estadounidenses a Cuba, autorizadas bajo la Ley de Reforma de Sanciones Comerciales y Mejora de las Exportaciones (TSREEA) de 2000, la Ley de Democracia Cubana (CDA) de 1992 y las regulaciones de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de EE.UU., así como de la Oficina de Industria y Seguridad (BIS) del Departamento de Comercio.

Desde el inicio de las exportaciones bajo la TSREEA en diciembre de 2001, las ventas totales han superado los $7.526 millones. Esta ley permite la exportación directa de productos alimenticios y agrícolas a Cuba, siempre que el pago se realice en efectivo.