Entre 2022 y 2023, más de medio millón de cubanos ha salido de la isla, en medio de una tensa crisis económica y social que no tiene para cuando acabar. “En Cuba ya no hay cómo vivir”, coinciden por estos días migrantes cubanos desde Miami, Chile o España.

Según un reporte de la agencia AFP, el número de cubanos saliendo de la isla a diario no se detiene, entre los que se enrumban a Nicaragua para caminar hacia la frontera sur de Estados Unidos, como los que salen con pasaporte español gracias a la llamada “ley de nietos”.

“Era muy difícil resolver y saciar las necesidades básicas, no había de nada, el tema de los apagones era insoportable y el de la comida, el precio del dólar subía sin parar”, dijo a AFP una cubana desde Miami, que arribó en noviembre de 2023, vía Nicaragua.

Desde Chile, otro cubano que todavía está ilegal, y que hizo el recorrido desde Guyana, argumentó: “Aquí hay de todo. Uno, trabajando dignamente, vive bien”. Aunque sin papeles, el cubano ya trabaja en la construcción, en Valparaíso.

Migrantes cubanos salen de la isla en nueva oleada

Desde noviembre de 2021, miles de cubanos han salido de su país hacia Nicaragua, que les facilitó la entrada al eliminar el requisito de visa. Esta medida abrió una oportunidad para los cubanos que enfrentan una grave crisis económica en la isla, la peor en 30 años.

En 2023, se incrementó también el número de vuelos subarrendados que transportaban a migrantes cubanos desde La Habana a Managua, una situación que provocó la reacción de Estados Unidos, que impuso sanciones a estas compañías aéreas en noviembre. Pero el flujo no se detiene y en este 2024 los vuelos a Nicaragua siguen saliendo repletos de migrantes cubanos sin pasaje de regreso.

Por si fuera poco, desde Uruguay aseguran que en 2023 entraron más de 20 mil cubanos y precisamente desde España, señalan que hay cientos de miles de peticiones desde Cuba para la nacionalidad española por la Ley de Memoria Democrática (LMD).

“Tenemos pensado instalarnos allá a ver si nos va bien”, dijo un cubano de 24 años junto a su hermana, a la salida de la Embajada española con su nuevo pasaporte europeo en la mano.