El Banco Central de Cuba (BCC) confirmó la extensión de la bonificación del 6 % en los pagos online realizados en pesos cubanos (CUP) a través de Transfermóvil, Enzona y terminales de puntos de venta en comercios minoristas.

Esta medida, vigente desde el 29 de enero, busca incentivar el uso de los canales digitales y ampliar la bancarización en el país, según medios oficiales que se hacen eco de la misma.

Las transacciones en CUP que superen los 3,500 pesos recibirán una bonificación fija de 210 pesos, garantizando así un incentivo adicional para los usuarios de tarjetas Red asociadas a cuentas de ahorro, nóminas y pensiones.

Sin embargo, la bonificación no se aplicará en pagos online realizados en el sector turístico, en la compra de materiales de construcción y en la adquisición de combustible.

Fomento de la Bancarización y descuento del 6% en CUP

El descuento del 6 % se ha convertido en una estrategia clave para aumentar el uso de pagos digitales en Cuba.

En 2023, el BCC estableció esta bonificación de manera fija en sectores con menor operatividad digital, favoreciendo la inclusión financiera y la digitalización de transacciones en el país.

Según Susana Fernández Correa, jefa del departamento de Banca Electrónica de Bandec Cienfuegos, entrevistada por el medio local 5 de septiembre, esta medida «ha sido bien recibida por los clientes», ya que representa un ahorro significativo en la liquidación de bienes y servicios.

Diversas entidades cubanas, como Etecsa, la Empresa Eléctrica y la ONAT, también implementaron descuentos similares para incentivar el uso de pagos digitales en CUP, consolidando la transformación digital del sistema financiero en Cuba.

Aunque la situación eléctrica y la mala conexión no colabora con la llamada «bancarización» y este tipo de descuentos del 6% en CUP.

«Muy buena intención, pero quien controla eso, ejemplo en la panadería dulcería en 41 no aceptan transferencias y ningún negocio de venta, tampoco todos te dicen con normalidad, no acepto y punto.
Algún día realidad escrita y vida cotidiana deben ser una sola, no como pasa ahora el discurso, por un lado, y la realidad por otro», apuntó un usuario.