La reconocida heladería Coppelia de La Habana reabrió sus puertas tras tres meses de reparaciones, pero los clientes no han tardado en manifestar su descontento en redes sociales. Así critican la calidad del helado del Coppelia capitalino, ahora con precios más altos.

La locutora y presentadora cubana Laritza Camacho visitó el icónico establecimiento y compartió su experiencia en redes sociales, destacando problemas en el servicio y el estado de las instalaciones.

Camacho visitó Coppelia el miércoles de esta semana junto a un amigo, sorprendida por la falta de cola. Sin embargo, poco después de sentarse, una dependienta les pidió cambiar de mesa, ya que el área donde estaban sentados estaba cerrando caja.

A pesar de los anuncios sobre una gran variedad de ofertas, solo había disponibles dos sabores: vainilla y rizado de chocolate.

«El helado no estaba malo», admitió Camacho, pero resaltó que el lugar no mostraba mejoras significativas tras la remodelación.

«Los toldos negros de churre, las sillas despintadas y la misma vajilla plástica», describió en su publicación de Facebook, algo que varios medios replicaron luego.

Critican helado y heladería Coppelia en La Habana

Durante su visita, observó a trabajadores discutiendo y presenció la llegada de una pareja conformada por una cubana y un extranjero.

El turista, desconcertado por las condiciones del lugar y la falta de atención, manifestó su descontento: «No quiero que me traten como si fuera Maradona, pero merezco un respeto mínimo. Ustedes los cubanos no se dan a respetar», según relató Camacho.

Otros clientes también han expresado su decepción. Pedro Gandara, quien visitó el local una semana después de la reapertura, calificó la situación como «igual o peor», destacando el alto precio de una ensalada de helado y la falta de cambio.

El Ministerio de Comercio Interior (MINCIN) aseguró que tras el proceso de remozamiento, Coppelia cuenta con nuevos toldos y señaléticas, además de una variada oferta de especialidades a precios accesibles. Sin embargo, la experiencia de los clientes sugiere lo contrario.

El reportero oficialista, Francisco Rodríguez Cruz, también manifestó que había «nuevos precios, pago en línea y diversidad de especialidades y sabores», pero mantenía sus «sellos distintivos: el agua caliente y la demora en el servicio».