Cubanos que llegaron a España este lunes, en medio del caos por el corte eléctrico en casi todo el país, aseguran a la prensa entre bromas que los persiguen los apagones.

Un apagón eléctrico masivo registrado este lunes provocó el caos en Madrid, sobre todo en la estación de tren de Atocha, uno de los principales núcleos de transporte de la capital española. La falla en el suministro paralizó la circulación de trenes, interrumpió sistemas electrónicos y alteró los planes de viaje de miles de usuarios.

«Salimos de Cuba porque allí la situación está muy mala, hay apagones de cuatro, seis horas todos los días y resulta que ahora en Madrid también”, dijo a EFE, el cubano llamado Joel, mientras esperaba con su pareja Gladys, en una terraza de la estación de trenes, tras saber que estaba interrumpida la circulación.

Joel y Gladys aterrizaron en Madrid el sábado pasado y tras completar algunos trámites, tenían previsto disfrutar de unos días en Barcelona, adonde planeaban viajar en tren este lunes, hasta el apagón generalizado.

“Todavía tenemos algo de esperanza, pero la verdad… no pinta bien”, comentó Gladys, sentada junto a otra pareja con la que hasta hace poco no tenían relación, pero con quienes compartían entonces la incertidumbre y mesa, unidos por la excepcionalidad del momento.

Cubanos y apagón en España

Esta pareja de cubanos finalmente vio frustrado el inicio de sus vacaciones. “Parece que nos están siguiendo los apagones”, comentaron con resignación, recordando los frecuentes cortes de electricidad en la isla, que llegan a ser de más de 24 horas en algunos lugares, como ocurrió recientemente en Matanzas. 

El apagón ha generado largas filas, cancelaciones y una notable falta de información oficial durante las primeras horas del incidente. Autoridades locales investigan las causas del fallo mientras intentan restablecer el servicio con la mayor celeridad posible.

Última Hora del apagón en España. Según los reportes matutinos de este martes, España había recuperado en menos de 24 horas el 99% del suministro eléctrico con el transporte ferroviario todavía a medio tres, pues quedaban varios trenes atrapados en las vías que había que remolcar.