Luego de que se anunciara la detención de la venta de gas licuado de petróleo (GLP) en la mayoría de las provincias cubanas, la principal inquietud de la población gira en torno a cuándo se restablecerá el servicio y la distribución de gas se normalizará nuevamente. Desde el oficialismo ofrecieron esta respuesta.

Según informó Irenaldo Pérez Cardoso, director adjunto de Unión Cuba Petróleo (CUPET), se espera que en los próximos días llegue una nueva descarga de GLP, a partir de un buque que ya se encuentra en aguas nacionales.

No obstante, la reanudación del servicio dependerá de que se concrete el pago al proveedor internacional.

¿Qué se necesita para retomar la distribución? El barco con el nuevo cargamento de gas está listo para descargar, pero la operación aún no puede ejecutarse por falta de financiamiento.

Una vez realizado el pago, el combustible podrá ser desembarcado y comenzará la distribución a la red de comercialización nacional, con prioridad para los hogares y la etapa de verano.

Distribución de gas en Cuba

Mientras se concreta esta operación, los servicios vitales no quedarán desatendidos. Las pequeñas producciones nacionales, provenientes de la refinería de Cienfuegos y la Planta Energas de Puerto Escondido, seguirán suministrando gas a hospitales, centros sociales y otros servicios priorizados.

Según la oficialidad, el embargo económico de Estados Unidos y la falta de acceso a financiamiento internacional han dificultado significativamente las gestiones para adquirir combustibles, afectando la regularidad en el suministro de GLP a la población.

Este 2 de julio desde el oficialismo, confirmaron que la comercialización del gas licuado de petróleo (GLP) había quedado detenida en casi todo el país debido al agotamiento del inventario disponible.

Luego de más de 30 días de distribución, ya se había consumido el GLP proveniente del último buque que arribó en mayo.

Este corte afecta directamente a los hogares cubanos, que solo lograron cubrir entre el 50 % y el 60 % de la demanda nacional. En las provincias de La Habana, Artemisa y Mayabeque, la cobertura alcanzó hasta un 66 %.