El Gobierno cubano confirmó que analiza la introducción de billetes de mayor denominación, en un momento en el que el efectivo se vuelve insuficiente frente a los precios crecientes y el deterioro del valor de la moneda nacional.
Durante su intervención en la Mesa Redonda, el ministro de Economía recordó que en años recientes se puso en circulación el billete de mil pesos, el más alto del actual cono monetario.
Sin embargo, afirmó que existen estudios técnicos que recomiendan seguir ampliando la escala de billetes.
Un análisis motivado por la realidad de los precios
La inflación acumulada de los últimos años ha multiplicado el valor nominal necesario para realizar compras básicas.
Para muchos cubanos, operaciones cotidianas como pagar alimentos, transporte o servicios implican manejar grandes cantidades de efectivo.
El Gobierno reconoció esta situación y explica que el análisis de nuevas denominaciones responde a la necesidad de facilitar transacciones y reducir el volumen físico de dinero que requiere la población.
Aunque no se mencionaron cifras específicas, el mensaje implícito es claro: la estructura actual del peso cubano quedó pequeña frente al nivel de precios. Un billete de 5 mil pesos u otro de 10 mil podrían estar en el horizonte.
Efectivo y economía real: un reto persistente
La posible llegada de billetes superiores al de mil pesos conviviría con una moneda que continúa perdiendo valor en los mercados no oficiales, donde la tasa varía de manera constante.
La emisión de nuevos billetes no modifica directamente el poder adquisitivo, pero sí alivia la logística diaria de pagos en una economía con altos niveles de inflación.
Lo que el Gobierno no detalló es si estos cambios vendrán acompañados de medidas adicionales para estabilizar el valor del peso.
Un proceso sin fechas, pero ya en estudio
El ministro explicó que la decisión se tomará “si resulta necesario”, dejando abierta la puerta a que la medida se apruebe en cualquier momento.
No se dieron plazos ni se reveló si los nuevos billetes formarían parte de un rediseño más amplio del cono monetario.
Por ahora, la señal oficial indica que el debate interno existe y que el país podría ver billetes de mayor valor en circulación si los precios continúan en escalada.
