Precios en Cuba: un jubilado paga $2000 pesos por una bolsa de leche en polvo

Los precios  en Cuba, elevados, y hasta impagables, siguen siendo un dolor de cabeza para las familias de la isla. La situación se vuelve más crítica si se trata de los jubilados, con pagos muy inferiores al costo de la mayoría de los alimentos.

El crítico de arte Jorge Gómez de Mello es uno de ellos, y en su perfil de Facebook mostró lo complicado de su día a día en Cuba.

El antes director de la Revista de Arte Contemporáneo, contó en detalle las peripecias que enfrentó para comprar una bolsa de leche en polvo. Según declaró, el objetivo de su publicación es reflexionar acerca de “las anormalidades de nuestra alucinante y maltrecha realidad”.

“Soy un jubilado que próximamente cumplirá 70 años de edad, de los que he trabajado durante más de 45. Recibo una pensión de 1986 devaluados pesos cubanos, por lo que faltarían 14 pesos para completar 2000 cada mes”, señala Gómez de Mello.

Luego refiere que tras buscar durante varios días en los sitios más increíbles, finalmente pudo comprar una bolsa de leche en polvo. El precio sin dudas espanta, pues el jubilado desembolsó nada menos que $2000 pesos por el producto.

Un jubilado y los precios de la leche en polvo

Continúa el crítico de arte su reflexión, con los cálculos de lo que representa una bolsa de leche en su dieta mensual.

“Con 1 kg de leche en polvo se pueden preparar 10 litros de leche líquida, lo que alcanza para que mi esposa y yo tomemos media taza de leche diaria durante un mes”.

Entonces llega la certeza de la difícil situación que enfrenta un jubilado en la Cuba de hoy.

“Después de esforzarme trabajando durante toda la vida para cubrir las necesidades de mi familia, al final estoy recibiendo una retribución que nos alcanza apenas para garantizar media taza de leche cada día”.

Jorge de Mello concluye cuestionando el hecho de que las autoridades del país no ha acaben de “presentar una propuesta de solución realista y efectiva para propiciar que los más de 2 millones de viejos que malvivimos en Cuba tomemos un poco de leche cada día”.