Desde este lunes, los transportistas privados de La Habana podrán comprar diésel en un servicentro habilitado exclusivamente para la venta racionada del combustible a ellos. Solo los llamados “boteros” que porten una licencia de operación del transporte podrán efectuar la compra de 100 litros de diésel por vehículo. El gobierno de la capital recordó que todavía continúa vigente la prohibición de depositar combustible en cualquier otro envase. El servicentro “El Futuro”, ubicado en la calle 100 y Vento, fue el seleccionado para esta medida que favorece a los propietarios particulares.

No obstante, los choferes privados también podrán comprar diésel en los cuatro restantes servicentros con esos fines en La Habana. La nueva disposición surgió como respuesta del gobierno a la huelga de “boteros” que provocó caos en la transportación de pasajeros. 

Sin embargo, ante la solución propuesta varios choferes han reaccionado molestos, sobre todo los que operan vehículos con depósitos de menos de 100 litros. Como estos no podrán adquirir la cantidad restante del diésel que requieren, se verán obligados a interrumpir sus servicios de transportación para comprar con regularidad. 

Solo un parche ante la escasez de combustible

Ante la evidente escasez de combustible que sufre la Isla, esta decisión de vender diésel en el servicentro “El Futuro” servirá solo como paliativo. Al ser exclusiva la venta para los “boteros”, quedarán fuera de esta posibilidad los choferes que no ofrecen el servicio de transporte particular.

Actualmente, todos sufren la falta del producto y los elevados precios que tiene en el mercado informal, cada vez más incontrolable. De hecho, múltiples comentarios en las redes sociales apuntan a la venta racionada como vía propicia para que los trabajadores de las gasolineras salgan beneficiados. 

Comentan que el combustible de aquellos depósitos que no lleguen a 100 litros, lo venderán a sobreprecio sin que las autoridades adviertan la ilegalidad. Según el diario local Tribuna de La Habana, la venta se hará por orden de llegada. Se creará un registro en el propio servicentro para organizar la venta del combustible.