El presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva que establece el inglés como el único idioma oficial de Estados Unidos.

La medida elimina la obligación de ofrecer documentos y servicios gubernamentales en otros idiomas, lo que podría afectar a millones de inmigrantes que no dominan el inglés.

Solo inglés en trámites y documentos oficiales

Con esta orden, Trump revierte un mandato del expresidente Bill Clinton que garantizaba asistencia lingüística a personas con dominio limitado del inglés en agencias federales y organizaciones que reciben fondos públicos. A partir de ahora, todas las comunicaciones gubernamentales se realizarán únicamente en inglés, lo que obliga a quienes no lo hablen a adaptarse sin excepción.

«Establecer el inglés como el idioma oficial no solo agilizará la comunicación, sino que también reforzará los valores nacionales compartidos», señala el documento firmado por Trump. Además, justifica la medida asegurando que aprender inglés «abre puertas económicas, facilita la integración y fomenta una sociedad más cohesionada».

Millones de inmigrantes en riesgo

Más de 40 millones de personas en Estados Unidos hablan español en casa, según datos del censo. La eliminación del acceso a información en otros idiomas podría generar obstáculos para millones de inmigrantes en trámites legales, asistencia médica, educación y servicios esenciales.

La orden también afecta a los estados y ciudades que históricamente han brindado información en varios idiomas para facilitar la integración de sus residentes. Aunque más de 30 estados ya habían declarado el inglés como idioma oficial, esta es la primera vez que el gobierno federal impone la medida a nivel nacional.

Críticas y posibles consecuencias

Organizaciones proinmigrantes han calificado la decisión como una política excluyente que marginará a quienes no dominan el inglés. «Esta orden no fomenta la integración, sino que crea barreras innecesarias para millones de personas», denunció un portavoz de la American Civil Liberties Union (ACLU).

Además, el impacto podría extenderse a hospitales, oficinas de asistencia social y juzgados, donde muchos inmigrantes dependen de la información en su idioma para acceder a servicios básicos.

Eliminación del español en la Casa Blanca

Uno de los primeros efectos visibles de la orden ejecutiva fue la eliminación de la versión en español del sitio web oficial de la Casa Blanca, tal como ocurrió durante el primer mandato de Trump. Aunque la administración de Biden había restaurado el sitio, la nueva política lo ha vuelto a suprimir.

La Casa Blanca no ha confirmado si la página será restablecida en el futuro, pero las señales indican que el gobierno actual apuesta por un país donde el inglés sea el único idioma reconocido oficialmente.

Un cambio con impacto incierto

Aunque Trump argumenta que esta medida fortalecerá la unidad nacional, sus críticos advierten que puede generar una crisis en sectores como salud, educación y justicia. Millones de residentes podrían verse excluidos de información vital, lo que agravaría la desigualdad y dificultaría la integración de las comunidades inmigrantes en el país.