El expresidente Donald Trump ha vuelto a ser el centro de la controversia por sus comentarios sobre inmigrantes indocumentados. En una reciente entrevista, el 7 de octubre de 2024, Trump insinuó que los inmigrantes que cometen homicidios lo hacen debido a «malos genes», utilizando nuevamente una retórica que ha sido calificada de deshumanizadora y provocativa.

Declaraciones durante una entrevista en radio

En su participación en «The Hugh Hewitt Show», un programa de radio conservador, Trump volvió a tergiversar las estadísticas de inmigración y delincuencia para atacar a la vicepresidenta Kamala Harris.

Falsamente afirmó que la administración permitía la entrada al país de «13.000 asesinos» a través de una «frontera abierta». Trump añadió que, en su opinión, «un asesino lo lleva en los genes» y afirmó que el país tiene «muchos malos genes ahora mismo».

Retórica deshumanizadora como parte de su campaña

Este es el más reciente ejemplo de cómo Trump utiliza un lenguaje despectivo y deshumanizante en su campaña presidencial para 2024, donde uno de sus pilares ha sido la promesa de endurecer la inmigración ilegal. Trump ha prometido deportaciones masivas si regresa a la Casa Blanca y ha hecho de la inmigración un tema central de su mensaje político. A lo largo de los últimos meses, ha recurrido a este tipo de declaraciones incendiarias, que buscan avivar los temores en torno a los inmigrantes indocumentados.

Comentarios pasados y polémica racial

No es la primera vez que Trump recurre a discursos que hacen eco de teorías raciales y de supremacía. El año pasado, en una entrevista, dijo que los inmigrantes indocumentados estaban «envenenando la sangre de nuestro país», un término que ha sido asociado históricamente con movimientos supremacistas blancos y nativistas. Estas declaraciones provocaron críticas de varios grupos de derechos civiles.

Además, en 2020, durante una parada de campaña en Minnesota, Trump hizo referencia a la «teoría del caballo de carreras» al elogiar a sus seguidores. Dijo que en Minnesota «tienen buenos genes». Esta teoría proviene de la cría selectiva de caballos, que sostiene que la selección genética puede producir líneas de sangre superiores. Una comparación que ha sido interpretada como un intento de glorificar la genética de ciertos grupos de personas.

Impacto de sus comentarios

Las afirmaciones de Trump sobre los inmigrantes indocumentados no solo han sido controvertidas por su contenido, sino también por su falta de respaldo estadístico.

Organizaciones de derechos civiles y estudios académicos han demostrado que los inmigrantes indocumentados tienen tasas de criminalidad más bajas que los ciudadanos nacidos en Estados Unidos. Sin embargo, Trump continúa utilizando este tipo de declaraciones para reforzar su mensaje político y alimentar una narrativa en contra de los inmigrantes.

En el contexto de su campaña, estas palabras buscan movilizar a sus seguidores más conservadores. Aviva entonces el miedo y la desconfianza hacia las personas que ingresan al país sin documentos. El uso de una retórica tan cargada ha provocado tanto elogios por parte de sus simpatizantes como críticas severas por parte de sus oponentes. Estos consideran que sus discursos alimentan el racismo y la xenofobia.

Es evidente que Trump seguirá utilizando estos temas como estrategia política, reafirmando su postura firme en torno a la inmigración y apelando a un electorado que comparte su visión.

Sin embargo, sus declaraciones siguen generando un amplio debate sobre los límites del discurso político y el impacto que estas palabras pueden tener en la cohesión social del país.