El presidente de Estados Unidos elevó este lunes el tono contra el gobierno venezolano con declaraciones poco habituales por su claridad. Mientras continúa una operación naval en el Caribe, Donald Trump deslizó abiertamente que Nicolás Maduro debería abandonar el poder.
Las afirmaciones se produjeron en medio de la búsqueda activa de un petrolero vinculado a Venezuela, una persecución que ya supera las 24 horas y que forma parte de un despliegue naval más amplio en la región.
Una presión sin rodeos desde la Casa Blanca
Trump confirmó que Estados Unidos sigue rastreando un buque petrolero en aguas cercanas a Venezuela y aseguró que su captura es solo cuestión de tiempo. “Está avanzando y al final lo conseguiremos”, afirmó durante una conversación con CNN desde Palm Beach.
El mandatario insistió en que la embarcación “salió de Venezuela”, aunque informes oficiales indican que navegaba rumbo al país cuando fue detectada por la Guardia Costera estadounidense. El buque, identificado como Bella 1, es considerado parte de la llamada flota en la sombra utilizada para transportar crudo de países sancionados.
Estados Unidos ya ha interceptado otros dos petroleros este mes en el Caribe, como parte de una estrategia que busca cortar los ingresos petroleros del gobierno venezolano.
“Sería inteligente que lo hiciera”
Más allá del operativo naval, el punto central de la jornada estuvo en el mensaje político. Al ser consultado sobre sus intenciones finales en Venezuela, Trump evitó dar una respuesta directa, pero dejó una de sus declaraciones más explícitas hasta ahora.
“Creo que sería inteligente que lo hiciera”, dijo al referirse a una posible salida de Maduro del poder. Aunque matizó que no podía afirmarlo abiertamente, admitió que ese escenario está sobre la mesa.
El presidente también volvió a mencionar la posibilidad de acciones más duras, incluyendo operaciones terrestres, y destacó el tamaño del despliegue militar en la región. Aseguró que Estados Unidos cuenta con “la mayor Armada” que ha tenido en Sudamérica.
Bloqueo petrolero y control de los cargamentos
La semana pasada, Trump ordenó un bloqueo total a los petroleros sancionados que entren o salgan de Venezuela. Este lunes confirmó que el petróleo incautado no será devuelto.
“Nos lo vamos a quedar”, afirmó, dejando abierta la posibilidad de incorporarlo a la Reserva Estratégica de Petróleo de Estados Unidos. También señaló que los buques interceptados pasarán a control estadounidense.
Funcionarios de la Casa Blanca consideran que estas interdicciones envían un mensaje claro a Caracas y a las redes que facilitan la exportación de crudo venezolano fuera de los canales oficiales.
Contactos con petroleras y escenario post-Maduro
Trump reveló además que ha conversado con compañías petroleras estadounidenses a las que se les confiscaron activos en Venezuela. Según dijo, los intercambios se han centrado en cómo sería el país tras una eventual salida de Maduro.
El sábado, la Guardia Costera interceptó el petrolero Centuries en aguas internacionales, y días antes fue incautado el buque Skipper, vinculado a operaciones con Irán.
Las declaraciones de este lunes marcan un cambio relevante en el discurso público del presidente. Por primera vez, Trump plantea de forma casi directa que el futuro de Venezuela pasa por la salida de Maduro, mientras refuerza la presión económica y militar en el Caribe.
