El temblor de tierra, con epicentro cerca de Greenback y una profundidad aproximada de 25 kilómetros, ocurrió poco después de las 9:00 a.m. y fue perceptible en al menos cinco estados.

Un sismo de magnitud 4,1 sacudió este sábado por la mañana el este de Tennessee, en una de las regiones sísmicamente más activas del sureste de Estados Unidos.

Los informes preliminares del Servicio Geológico de Estados Unidos indican que el movimiento telúrico fue sentido con claridad en Knoxville y Chattanooga, así como en ciudades de Georgia, Carolina del Norte y Carolina del Sur.

En lugares como Atlanta, Asheville o Greenville, muchos residentes reportaron haber sentido sus casas vibrar durante varios segundos, aunque no se han registrado daños materiales ni personas lesionadas.

Esta zona del país, que abarca el este de Tennessee, el noroeste de Georgia y el noreste de Alabama, forma parte de una franja geológica conocida por una actividad sísmica constante. Aunque no suele registrar terremotos de gran magnitud, sí experimenta con cierta frecuencia sismos moderados.

Precedentes cercanos

Uno de los más recientes tuvo lugar en diciembre de 2018, cuando un sismo de magnitud 4,4 sacudió la zona de Decatur, Tennessee. Aquel evento también se sintió en varios estados vecinos y fue, en su momento, uno de los temblores más fuertes en el área desde 1973.

Históricamente, el sismo más notable en la región fue el ocurrido cerca de Alcoa, Tennessee, en noviembre de 1973, con una magnitud de 4,7. Aunque no causó grandes daños, alertó sobre la vulnerabilidad sísmica de una zona que muchos no asocian con movimientos telúricos frecuentes.

Más al norte, la zona sísmica de New Madrid, que se extiende hasta el oeste de Kentucky y el sur de Illinois, ha sido responsable de algunos de los terremotos más potentes en la historia de Estados Unidos,. Como los de 1811 y 1812, con magnitudes estimadas de hasta 8,0.

En el caso del temblor de este sábado, las autoridades locales recordaron la importancia de tener planes de emergencia en hogares y edificios, incluso en regiones donde los terremotos no son tan comunes. Las agencias de manejo de emergencias continúan monitoreando la zona, aunque no se esperan réplicas significativas.