Policías Federales y miembros del Ejército Mexicano resguardan el Hospital General de Huixtla, Chiapas, donde fueron llevados los migrantes heridos tras recibir disparos de militares en un confuso incidente. Según la Fiscalía General de la República (FGR), entre los seis fallecidos no se encuentran cubanos.

La FGR informó que las víctimas mortales confirmadas son una persona de Honduras, otra de Perú y tres de Egipto. No obstante, la nacionalidad del sexto fallecido no fue aclarada, aunque la presidenta Claudia Sheinbaum mencionó previamente que sería de El Salvador.

En el lugar de los hechos murieron cuatro personas, mientras que dos mujeres de Egipto fallecieron más tarde en el hospital. Además, una decena de migrantes resultaron heridos y 17 más salieron ilesos.

«La mayoría de las personas lesionadas e ilesas han sido identificadas como ciudadanos de Cuba, Nepal, Pakistán, India y Egipto», explicó la FGR, aunque sin detallar las cantidades ni el estado de los heridos. Según CNN, entre los heridos habría cubanos, pero no se proporcionaron más detalles al respecto. Hasta el momento, las autoridades cubanas no se han pronunciado sobre el suceso.

Investigación en curso

La FGR confirmó que los militares implicados en el incidente han sido «separados de sus funciones» y se encuentran bajo arresto y bajo investigación por sus propias autoridades. Además, un equipo de fiscales, policías, peritos y psicólogos ha sido enviado a Tapachula para realizar las diligencias necesarias.

Las autoridades mexicanas han solicitado información al Instituto Nacional de Migración, la Interpol y el Gobierno de Guatemala, país desde donde presuntamente ingresaron los migrantes y quienes los transportaban. Por el momento, se continúan tomando declaraciones de las personas ilesas y de los heridos que se encuentran en condiciones de hacerlo, con el apoyo de sus consulados y personal especializado.

La presidenta Claudia Sheinbaum calificó el incidente como un “hecho lamentable” que debe ser investigado y sancionado, asegurando que “no puede repetirse una situación así”.

Según la versión oficial, los militares dispararon a una camioneta que seguía a un vehículo tipo pick up que viajaba a alta velocidad y que logró evadirse. Los soldados afirmaron haber escuchado detonaciones, lo que les llevó a disparar contra la camioneta, que en realidad transportaba a 33 migrantes de varias nacionalidades.

Este jueves, cuatro de los heridos fueron dados de alta del Hospital General de Huixtla y trasladados a una estación del Instituto Nacional de Migración. Entre ellos, tres hombres de Nepal y uno de Egipto. Otros cuatro migrantes, dos de ellos en estado grave, permanecen hospitalizados, pero las autoridades no han confirmado sus nacionalidades.