El Gobierno de España, a través del Consejo de Ministros y bajo la propuesta del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, aprobó un nuevo Reglamento de Extranjería con el objetivo de fortalecer la integración de personas migrantes. 

Esta reforma busca abordar tres ejes principales: trabajo, formación y familia, además de adaptar la normativa a las necesidades laborales y demográficas del país, precisa el sitio web oficial del Ministerio.

La ministra Elma Saiz describió la iniciativa como “la reforma más integral y ambiciosa en 13 años”. Según explicó, este nuevo reglamento no solo protege derechos y simplifica trámites, sino que también establece un marco jurídico más claro y flexible para facilitar la regularización de migrantes que deseen desarrollar su proyecto de vida en España.

“Aporta seguridad jurídica y amplía las posibilidades para quienes viven en nuestro país, mejorando su integración social y laboral”, puntualizó Saiz.

Cambios clave en visados y regularización por arraigo

El reglamento introduce un nuevo enfoque en los visados, simplificando los requisitos y estableciendo autorizaciones iniciales de un año, que se renovarán por períodos de cuatro años. Además, extiende la duración del visado para búsqueda de empleo de tres meses a un año, lo que permitirá una mejor inserción en el mercado laboral.

En cuanto al arraigo, se han creado cinco modalidades: social, sociolaboral, familiar, socioformativo y de segunda oportunidad. Esta última, según Saiz, es una innovación destinada a personas que han perdido su residencia en los últimos dos años. Además, el tiempo mínimo de permanencia en España para acceder al arraigo se reduce de tres a dos años.

“El objetivo es reforzar las vías de acceso a la regularización, promoviendo una vida plena para las personas migrantes, con derechos y deberes como cualquier ciudadano”, destacó la ministra.

Impacto estimado y medidas inclusivas

Se calcula que esta reforma permitirá regularizar a 900.000 personas en tres años, con alrededor de 300.000 beneficiarios anuales. Para finales de 2023, más de 210.000 personas ya habían regularizado su situación a través del arraigo, reflejando un aumento del 30,4 % respecto a 2022.

El reglamento también mejora las condiciones para los trabajadores temporales, facilita el acceso a permisos para estudiantes y amplía los derechos en la reagrupación familiar, incluyendo ahora a parejas no registradas formalmente y ampliando la edad de hijos reagrupados hasta los 26 años.

“Es un paso firme hacia una integración inclusiva y respetuosa con los derechos humanos, equilibrando nuestras necesidades como sociedad con la protección de quienes han elegido España como su hogar”, concluyó Saiz.

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