Insólito hecho se vuelve viral en Cuba: rompen vidriera de Etecsa con un pan

En las últimas horas, se han viralizado en Cuba las imágenes de una oficina de Etecsa en Granma, cuya vidriera fue impactada por un pan. Sí, como lo lees. 

La página del periodista cubano Ernesto Morales publicó este mensaje sobre el tema: “vandalizan la sede provincial de ETECSA en Granma… ¡Con un pan! Informaciones preliminares apuntan a que el individuo andaba en un motor y lanzó el pan en movimiento contra la fachada de este local, ocasionando la ruptura de sus cristales”. 

Asimismo, bromeó sobre el hecho: “Trabajadores de la empresa, ubicada en el reparto Jesús Menéndez de Bayamo, comentaron que este atentado con pan sienta un peligroso precedente. Si a alguien se le ocurre detonar una bolsa de Café Hola, o si el pan hubiera llevado dentro croquetas Prodal, estaríamos hablando de males mayores”. 

Morales respondió más tarde en los comentarios a su publicación: “A quienes me están preguntando si es real: sí, lo es, no estoy bromeando. Son fotos reales del incidente este viernes”.

“Para nadie es una secreto que el pan sufre una metamorfosis, cuando llega tiene un color, una textura y un peso… pero al pasar el tiempo (de la noche a la mañana) cambia de color y textura y peso… y al pasar los días fácilmente al ser lanzado puede romper un cristal, como fue el caso”, opinó una usuaria santiaguera. 

VIRAL EN CUBA: ROMPEN VIDRIERA CON PAN DE LA BODEGA

“La prueba de un pan a prueba de vidrios: Aceptada. Nuestros estómagos merecen un premio”; “El pan de la libreta es sagrado. Nadie lo va a tirar así de fácil con tantas piedras en el camino”, escribieron otras dos personas. 

Hasta el momento de redactar esta nota, ninguna fuente oficial se había pronunciado sobre el tema que ha generado mayormente risas entre los cubanos. 

“Eso fue el viernes, yo pasé por ahí y lo de ETECSA estaba lleno de trabajadores, pensé que estaban repartiendo líneas o algo, luego en el policlínico dijeron que fueron dos pedradas. Pero, asere, ¿un pan?”, señaló desde X un tuitero. 

Foto: Ernesto Morales