El debate volvió a escalar este lunes tras un movimiento diplomático que agitó aguas en el Ártico. Una designación política y varias declaraciones encendieron alarmas en Copenhague y en Bruselas.
El debate volvió a escalar este lunes tras un movimiento diplomático que agitó aguas en el Ártico. Una designación política y varias declaraciones encendieron alarmas en Copenhague y en Bruselas.