El presidente Donald Trump quiere eliminar los cupones de alimentos (food stamps) para migrantes con asilo y parole humanitario.

Una nueva propuesta legislativa de los republicanos amenaza con sacar del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) a miles de migrantes con estatus legal en Estados Unidos, incluidos quienes han sido admitidos con parole humanitario o solicitan asilo.

Recortes para financiar políticas de Trump

El borrador, conocido como la “Gran y hermosa ley”, forma parte de la agenda del presidente Donald Trump. Contiene más de mil páginas y busca compensar los costos fiscales de su reforma tributaria y endurecimiento migratorio. Entre sus puntos clave está la reestructuración de programas sociales como el SNAP, que hoy beneficia a cerca de 40 millones de personas.

Según los nuevos requisitos, quienes no sean ciudadanos o residentes permanentes quedarían fuera. Esto incluye a miles de migrantes recién llegados con permiso legal, pero sin residencia, que hoy dependen de estos cupones para poder alimentarse mientras regularizan su situación.

Suben los requisitos para padres y adultos sin hijos

El plan también eleva la edad hasta la cual los adultos sin dependientes deben probar que trabajan, pasando de 54 a 64 años. Además, los padres con hijos pequeños tendrán que demostrar empleo desde que el menor tenga 7 años, en lugar de los 18 actuales, excluyendo así a muchas madres y padres que hoy acceden al programa.

Golpe a los estados y a los bancos de alimentos

El cambio afectaría también el financiamiento: los estados tendrían que asumir el 5 % del costo del SNAP a partir de 2028 y hasta el 75 % de sus gastos administrativos. Si un estado comete errores al asignar ayuda, deberá pagar el 25 % del costo del programa, lo que aumentará la presión sobre los presupuestos locales.

Organizaciones como el Banco de Alimentos del Gran Pittsburgh advirtieron que estos recortes serían los más severos en la historia del país. En un contexto donde casi 50 millones de estadounidenses enfrentan inseguridad alimentaria, consideran que esta reforma agravará aún más la situación.

¿Cuándo podría aprobarse?

El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, planea someter el proyecto a votación antes del Memorial Day. Si se aprueba, marcaría un duro retroceso para miles de familias migrantes con parole humanitario, que ya enfrentan obstáculos para acceder a empleo y servicios básicos.