A partir de este mes la institución cubana de hospedajes de Campismo, en la provincia de Villa Clara, anunció que se aplicará un aumento de los precios en sus instalaciones en dicho territorio central. Una medida que no es privativa de este territorio, sino que es una política de “nuevas tarifas” a nivel nacional.

Según el Portal del Ciudadano en Facebook, desde el primer día de enero, existen “nuevas tarifas de precios por Alojamiento en nuestras instalaciones de Campismo”. Unas capacidades que se están vendiendo desde el 2 de enero hasta el 31 de marzo.

”Para más información puede llamar a: Teléfono: 42204905. Lugar: Agencia de ventas. Calle Maceo no. 315 entre San Miguel y Nazareno. Santa Clara”, concluyen en dicho mensaje en redes sociales.

¿Cuáles son los nuevos precios de Campismo? Por ejemplo, el “Arcoíris o Seibabo”, una cabaña de 8 personas, que es la capacidad máxima, en etapa “no vacional” se paga a 304 pesos cubanos por noche. O sea, que si van tres días, se pagarían 912 pesos. Esto no incluye los equipos electrodomésticos que se pagan extra.

Por ejemplo, en estos campismos, de segunda categoría, el televisor cuesta por noche 18 pesos, 45 pesos el aire acondicionado y 8 pesos un ventilador. El minibar, vacío, cuesta a 18 pesos. Estos precios son en temporada baja, hasta el 30 de junio, porque de ahí en adelante todo aumenta.

OTROS PRECIOS DEL CAMPISMO CUBANO

En el mismo campismo antes mencionado, de julio al 30 de septiembre, las tres noches cuestan 1416 pesos por una cabaña de 8 personas. Por una semana de hospedaje se pagarían más de 3 mil pesos, sin contar el pago de los equipos.

Este es el hospedaje de campismo más costoso, porque son de “segunda clase”, pero los de “tercera” como los de la costa de Corralillo (Ganuza, Sierra Morena, etc) son más baratos.

“Soy fundadora del campismo y estoy de acuerdo con estas ofertas, pero espero que las condiciones de las cabañas se correspondan”, escribió la usuaria Marilyn Vázquez.

Otra usuaria, Minerva señaló que “en estos momentos de inflación creo que no tiene sentido, por qué no tiene sentido, porque con esos precios sigue sufriendo el cubano promedio, el cubano que vive únicamente de su salario y de su jubilación, que no tiene ninguna entrada monetaria extra, piensen en eso”.