Cuba enfrenta una caída del 20,5% en la llegada de turistas en 2025 pese a nuevas rutas aéreas desde Rusia. Más detalles de inmediato. La isla atraviesa una profunda crisis turística, según confirman los datos oficiales publicados sobre la llegada de visitantes durante los primeros nueve meses de 2025.
Entre enero y septiembre, el país recibió un 20,5% menos de turistas en comparación con el mismo periodo de 2024, lo que refleja la gravedad del retroceso que vive uno de los sectores más importantes para la economía nacional.
A pesar de los esfuerzos del Gobierno cubano por mostrar señales de recuperación, las cifras revelan un panorama poco alentador.
En las últimas horas, medios oficiales destacaron la inauguración de la nueva ruta aérea San Petersburgo–Varadero, presentada como una “oportunidad estratégica para dinamizar el mercado ruso”. Sin embargo, los resultados actuales contradicen ese optimismo.
Rusia, que figura entre los cuatro principales emisores de turistas hacia Cuba, ha experimentado la mayor contracción de visitantes en lo que va de año.
Entre enero y septiembre de 2025, el arribo de viajeros rusos cayó un 37,2%, marcando la disminución más pronunciada entre los mercados emisores, según la ONEI.
Este desplome agrava la situación de un sector que no ha logrado recuperar los niveles previos a la pandemia ni consolidar nuevas fuentes de crecimiento.
La caída del turismo ruso también impacta a destinos emblemáticos como Varadero, principal polo de sol y playa del país, donde se concentran gran parte de las inversiones y estrategias de promoción.
Pese a la apertura de nuevas conexiones aéreas, la falta de incentivos, la escasez de servicios y los altos costos continúan limitando la competitividad del destino cubano frente a otros destinos del Caribe.
Con la temporada alta próxima a comenzar, el reto para el Gobierno cubano será revertir la tendencia negativa y atraer nuevos flujos turísticos en un contexto global cada vez más competitivo y exigente.
