El gobierno de la Isla ha tomado medidas más severas para salir a flote en medio de la situación actual, por ello anunció este martes la suspensión de los vuelos que arriben a Cuba desde cualquier parte del mundo y de todo tipo de aeronaves que transporten pasajeros, tanto en vuelos regulares como chárteres. Los extranjeros ya estaban vedados, ahora también lo están los residentes para evitar la propagación.

El gobierno de la Isla también ordenó la retirada de embarcaciones extranjeras de las aguas territoriales de la Isla. El aeropuerto José Martí sólo se mantendrá activo con los vuelos humanitarios o que intervengan en el traslado de mercancías necesarias en la actualidad.

Ambas decisiones fueron anunciadas por el primer ministro cubano Manuel Marrero Cruz en una reunión de análisis del plan gubernamental para prevenir y controlar la situación actual en el territorio nacional, según un reporte de la emisión nocturna del Noticiero Nacional de Televisión (NTV).

Marrero Cruz argumentó la decisión de suspender la entrada al país de todo tipo de aeronave, por la necesidad de “eliminar el arribo de pasajeros que siguen siendo un riesgo a la salud de las personas, tanto de los viajeros como de sus familiares”.

Desde el pasado 20 de marzo, al anunciarse el cierre de las fronteras para los no nacionales, el gobierno cubano había valorado posibles excepciones a esta medida, como las salidas de los colaboradores de salud, donaciones de otros gobiernos al país, una emergencia que requiera disponer de los servicios aeroportuarios, además de que se mantendría el comercio que llega por vía aérea.

Pero aunque se ha reducido el arribo al país de cubanos que estaban de viaje en el exterior, aún se mantienen un grupo de vuelos internacionales, tanto regulares como chárters, que transportan a personas residentes en Cuba, lo que está significando “un riesgo adicional para la operación en los aeropuertos, para las propias tripulaciones y los pasajeros”.

Indicó que el Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba dará a conocer la medida a las aerolíneas que están volando al país, para que se implementen los protocolos establecidos en estos casos. Marrero Cruz adelantó que se mantendrán las operaciones de carga aérea con fines comerciales.

Como muchas embajadas ya habían anunciado, adelantándose a estas medidas, y solicitando (como la de España o la de Estados Unidos) el retorno con inmediatez de sus ciudadanos a sus países, con esta medida tendrán que permanecer en Cuba por tiempo indefinido.

Iberia ya había anunciado que este 1ro de abril era su último vuelo, y en el caso de Estados Unidos, para este miércoles estaban fijados tres vuelos regulares de American Airlines y Jet Blue con destino a Miami y Fort Lauderdale.

Las cifras oficiales indicaban que hasta el martes permanecían en el país 20 mil 392 visitantes, de ellos 13 mil 010 extranjeros y 7382 cubanos emigrados.

El primer ministro explicó también que, pese a estar vigente desde el 24 de marzo la prohibición de la entrada de turistas al país, “se mantienen en las aguas territoriales un grupo de embarcaciones extranjeras, con tripulaciones y pasajeros extranjeros, que están haciendo bojeos por la isla, haciendo turismo, aunque se les ha impedido el arribo a nuestros puertos y la entrada”. Igualmente, precisó que si alguna embarcación requiere combustible, se le facilitará.

De hecho recientemente, las autoridades aeronáuticas cubanas respondieron a la solicitud de reabastecimiento de combustible, realizada por un avión de la aerolínea Cóndor, en su travesía Nicaragua-Alemania. Llegó al aeropuerto internacional Frank País García, de Holguín, el Boeing 767, con 221 pasajeros a bordo, que no bajaron del mismo, hasta que se reabasteció y voló hacia Alemania.