Cuba enfrenta una crisis de precios desbocados y escasez de alimentos mientras economistas expresan preocupación por el futuro económico del país.

La isla de Cuba está experimentando una aguda crisis económica marcada por una inflación descontrolada y una preocupante escasez de alimentos. Según datos recopilados por la revista 14yMedio, los precios de productos básicos se han disparado en todo el país en las últimas semanas.

Por ejemplo, el litro de aceite, una necesidad básica en muchos hogares cubanos, ha aumentado significativamente en varios mercados. En el MIPYME Zona K’liente, el precio se ha reducido en un 13%, pasando de 750 CUP a 650 CUP en solo una semana. Sin embargo, en otros lugares como el Mercado La Plaza Boulevard en Sancti Spíritus, el precio se ha mantenido estable en 650 CUP.

El aumento de precios también se ha observado en productos como el aguacate, cuyo precio ha subido un alarmante 33% en el Mercado La Plaza Boulevard. Otros productos, como la libra de calabaza china, han experimentado un aumento aún más dramático del 300% en el Mercado de las Calles 19 y B en el Vedado, La Habana.

La situación se agrava con la escasez de productos básicos en los estantes de los supermercados. La libra de arroz, por ejemplo, ha visto una disminución en su oferta, lo que ha contribuido a un aumento del 25% en su precio en el Mercado de las Calles 19 y B en el Vedado.

Lista actualizada de algunos productos:

Mayor aumento de precios en Cuba

Los cubanos se enfrentan a precios cada vez más altos en una amplia gama de productos, desde alimentos básicos como el arroz y el aceite hasta productos de lujo como el jamón Viking. Esta crisis de precios está poniendo una presión adicional sobre una población que ya enfrenta dificultades económicas significativas.

Economistas consultados sobre la situación expresan una profunda preocupación por el futuro económico de Cuba. Algunos advierten que el país podría estar al borde de una crisis aún más profunda si no se toman medidas efectivas para abordar la inflación y la escasez de alimentos. Sugieren que se necesitan reformas estructurales urgentes para estimular la producción interna y reducir la dependencia de las importaciones.

Las autoridades cubanas están luchando por contener la situación, pero hasta ahora han tenido poco éxito en estabilizar los precios y garantizar un suministro adecuado de alimentos para la población. Con la incertidumbre económica en aumento y las perspectivas sombrías, muchos cubanos temen que la situación empeore antes de mejorar.